El miedo, la preocupación, la culpa y la autoestigmatización son las principales emociones que experimenta una mujer al enfrentarse a un diagnóstico de infección por virus del papiloma humano (VPH). Esas emociones ocasionan un impacto físico, por lo que exteriorizarlas es esencial para afrontar la afección desde un estado psicológico ...
El miedo, la preocupación, la culpa y la autoestigmatización son las principales emociones que experimenta una mujer al enfrentarse a un diagnóstico de infección por virus del papiloma humano (VPH). Esas emociones ocasionan un impacto físico, por lo que exteriorizarlas es esencial para afrontar la afección desde un estado psicológico resiliente.
Para compartir las claves que pueden ayudar a la paciente en el manejo emocional del VPH, la Dra. Raquel Tulleuda, ginecóloga y sexóloga clínica, y la Sra. Vanesa Falcón, psicóloga especializada en terapia de pareja y sexóloga, han protagonizado la tercera edición de VPH Talks, una serie de encuentros organizados por Procare Health, laboratorio especializado en salud de la mujer, que se centran en dar visibilidad al virus del papiloma humano para "sacarlo del armario" y poner fin a todos los tabús que rodean a este tipo de infección de transmisión sexual (ITS). La charla está disponible en este enlace (ver capítulo 3): https://procarehealth.com/vph-talks/
En el marco del Día Mundial del Virus del Papiloma Humano (VPH), que se celebra el próximo 4 de marzo, las dos expertas han abordado el tema desde una perspectiva integral, reconociendo la necesidad de comprender y atender las emociones que surgen tras el diagnóstico de VPH. En su conversación, ambas han destacado la complejidad emocional que enfrentan las pacientes: desde el miedo y la preocupación hasta la autoestigmatización y la culpa ocasionada por sentir que "no se han cuidado lo suficiente" y por eso han adquirido esta ITS.
"El diagnóstico de VPH supone un shock para quien lo recibe", ha señalado Falcón, subrayando la importancia de obtener información de calidad y buscar apoyo emocional en el entorno cercano. Por ello, la psicóloga recomienda abordar el tema con naturalidad en la pareja, promoviendo la comunicación abierta y el apoyo mutuo, para superar la desconfianza y abordar un problema que debe exteriorizarse para informar a los posibles afectados más allá de la persona que dispone del diagnóstico "oficial" de presencia del VPH.
La Dra. Tulleuda también ha apuntado el estrés como otro factor desencadenante del "estrés oxidativo", que implica un impacto considerable en el sistema inmunitario y dificulta la resolución de la enfermedad, por lo que es esencial minimizarlo.
Ambas expertas han resaltado la importancia de la consulta multidisciplinar y el tratamiento integral, reconociendo el papel crucial de los psicólogos en el manejo emocional de la infección por VPH. En muchas ocasiones, la paciente abandona la consulta ginecológica con muy poca información y sin saber cómo gestionar el diagnóstico, por ello, la visita a un psicólogo va a ser imprescindible para la gestión de todas las emociones que se generen.
Tomar acción frente a la infección
El manejo de la infección por el VPH en pacientes con lesiones de cuello de útero es la espera vigilada, es decir, el seguimiento de la paciente cada 6 o 12 meses para ver su evolución. Así lo establecen las guías de la Sociedad Española de Colposcopia y Patología Cervical (AEPCC). Sin embargo, saber de la existencia de tratamientos como Papilocare® Immunocaps, un complemento alimenticio que ayuda a normalizar la microbiota vaginal y a fortalecer las defensas naturales del organismo y Papilocare® Gel Vaginal, como tratamiento para prevenir y tratar las lesiones de bajo grado causadas por el VPH, ayuda a las mujeres a tomar acción frente a la patología y sentir que pueden alcanzar una solución lo antes posible sin estar esperando a una nueva revisión semestral.
Esta "acción" es muy útil a nivel psicológico porque la paciente percibe que cuenta con un diagnóstico y un tratamiento, por lo que se fomenta la sensación de control y se alivia el estrés: "ponemos nombre a lo que nos sucede y con ello podemos orientar nuestras acciones hacia la mejoría, incentivando la sensación de bienestar", indica Vanesa Falcón.
El gel vaginal Papilocare® se centra en la normalización de lesiones cervicales de bajo grado producidas por el VPH. Estas funciones son posibles gracias a su innovadora tecnología y su formulación a partir de siete componentes: Coriolus-versicolor, un hongo utilizado ampliamente en la medicina tradicional china; Bioecolia®, un prebiótico que favorece el crecimiento de las bacterias beneficiosas como Lactobacillus crispatus; ácido hialurónico; beta-glucano; centella asiática; extracto de neem y extracto de aloe vera.
Esta combinación contribuye a prevenir el riesgo de lesiones provocadas por el virus al reepitelizar la zona de transformación del cuello del útero, normalizar las lesiones intraepiteliales causadas por el mismo, eliminar la sequedad vaginal, reepitelizar la mucosa cérvico-vaginal, reequilibrar la microbiota vaginal y mejorar la salud vaginal en general.
Varios ensayos clínicos internacionales, en los que han participado más de 600 pacientes, señalan la eficacia del gel vaginal Papilocare®. Entre los más destacados, el ensayo clínico Paloma, cuyos resultados recoge la revista científica americana Journal of Lower Genital Tract Diseases, o el estudio observacional Papilobs, publicado el pasado mes de julio en la prestigiosa revista internacional Cancers. Los resultados obtenidos son similares y resaltan las siguientes conclusiones:
6 claves para afrontar el VPH desde un plano emocional saludable
La conversación entre la Dra. Tulleuda y la Dra. Falcón destaca la necesidad de un enfoque holístico en el tratamiento del VPH, que no solo aborde los aspectos médicos, sino también el bienestar emocional de las pacientes.
En este sentido, las expertas recomiendan seguir estos 6 hábitos para sentir que controlan el VPH y reducir los síntomas de miedo y ansiedad que genera el diagnóstico: