Las infecciones del tracto urinario representan casi el 25% de las infecciones en las mujeres. Muchas son infecciones urinarias recurrentes acompañadas de dolor pélvico crónico y frecuencia urinaria, incluso después del tratamiento antibiótico. Al respecto, investigadores de la Facultad de Medicina de la Universidad de Duke de Carolina del Norte ...
Las infecciones del tracto urinario representan casi el 25% de las infecciones en las mujeres. Muchas son infecciones urinarias recurrentes acompañadas de dolor pélvico crónico y frecuencia urinaria, incluso después del tratamiento antibiótico. Al respecto, investigadores de la Facultad de Medicina de la Universidad de Duke de Carolina del Norte (EEUU) han identificado una probable causa como es el considerable crecimiento de células nerviosas en la vejiga.
La investigación, cuyos resultados han sido publicados en la revista ´Science Immunology´, proporciona un nuevo enfoque potencial para controlar los síntomas de las infecciones urinarias recurrentes. "Nuestro estudio describe, por primera vez, una causa subyacente e identifica una novedosa estrategia de tratamiento", explicó el autor principal, Soman Abraham, profesor de los departamentos de Patología, Genética Molecular y Microbiología, Inmunobiología Integrativay biología celular en la Facultad de Medicina de la Universidad de Duke.
Como parte del estudio, los investigadores recogieron biopsias de vejiga de pacientes con infecciones recurrentes del tracto urinario (ITU) que experimentaban dolor a pesar de que no había bacterias cultivables en la orina. Utilizando biopsias de personas sin ITU como comparación, encontraron evidencia de que los nervios sensoriales estaban sobreactivados en los pacientes con dichas infecciones, lo que explica la sensación persistente de dolor y la frecuencia urinaria.
"Por lo general, durante cada episodio de ITU, las células epiteliales cargadas de bacterias se desprenden y se produce una destrucción significativa del tejido nervioso cercano", indicó, por su parte, Byron Hayes, autor principal del estudio y anteriormente becario postdoctoral en el Departamento de Patología de Duke. "Estos eventos desencadenan un programa de reparación rápida en la vejiga dañada que implica un nuevo crecimiento masivo de células nerviosas destruidas", añadió.
Factor de crecimiento nervioso
Esta respuesta inmunitaria, incluidas las actividades de reparación, está dirigida por mastocitos, que son células inmunitarias que combaten las infecciones y los alérgenos. Los mastocitos liberan sustancias químicas llamadas factor de crecimiento nervioso, que impulsan el crecimiento excesivo y aumentan la sensibilidad de los nervios. El resultado es dolor y urgencia.
Los investigadores pudieron abordar estos síntomas tratando a los ratones del estudio con moléculas que suprimen la producción del factor de crecimiento nervioso generado por los mastocitos.
"Este trabajo ayuda a arrojar luz sobre una condición clínica desconcertante que impulsa los costos médicos y afecta la calidad de vida de millones de personas, principalmente mujeres", señaló el prof. Abraham. "Comprender la interacción entre los mastocitos y los nervios es un paso esencial hacia tratamientos efectivos para las personas que sufren infecciones repetidas del tracto urinario", concluyó dicho experto.