Científicos de diversos centros chinos han llevado a cabo un metanálisis sobre 167 ensayos clínicos, la mayoría de ellos aleatorizados, en el que establecen el riesgo de efectos adversos pulmonares (EAPs) asociados a los diversos regímenes de tratamiento oncológico basados en inmunoterapia y quimioterapia. La mayor incidencia de EAPs de cualquier ...
Científicos de diversos centros chinos han llevado a cabo un metanálisis sobre 167 ensayos clínicos, la mayoría de ellos aleatorizados, en el que establecen el riesgo de efectos adversos pulmonares (EAPs) asociados a los diversos regímenes de tratamiento oncológico basados en inmunoterapia y quimioterapia.
La mayor incidencia de EAPs de cualquier grado fue registrada con la terapia triple basada en anti-PDL-1, anti-CTLA4 y quimioterapia, mientras que los EAPs de grado 3-4 tuvieron su máxima incidencia con la combinación de anti-PD-1 y anti-CTLA4. En contraste, la menor incidencia de EAPs de cualquier grado y de grado 3-4 fue observada en los pacientes que recibieron la combinación de quimioterapia y terapia dirigida y la combinación de anti-PD-L1 y anti-PD-1, respectivamente. Maobai Liu, investigador de la Universidad Médica de Fujián y codirector del estudio, afirma que la quimioterapia resultó ser significativamente más segura que la monoterapia con inhibidores de los puntos de control inmunológico, que incluyen los anticuerpos dirigidos a las moléculas PD-L1, PD-1 y CTLA4.
También la combinación dual de estos anticuerpos representó mayor riesgo, en comparación con la monoterapia en asociación a quimioterapia. Esta relación fue sustanciada al considerar los EAPs fatales, que fueron más frecuentes con anti-PD1, la combinación de anti-PDL-1 y anti-CTLA4 y la combinación formada por los dos anteriores y quimioterapia. Esta última combinación también fue la que mayor asociación mostró con la incidencia de EAPs de cualquier grado en pacientes con tumores de las vías respiratorias, asegura Liu. El científico concluye indicando que los actuales hallazgos podrían contribuir a individualizar el riesgo en pacientes que reciben estos tratamientos.