El sector sanitario español está sufriendo un desajuste de talento muy acuciado, estimado en el 82%, debido al crecimiento sostenido de esta industria y al cambio de competencias necesarias para desarrollar las labores que se precisan en la actualidad. Esta es una de las conclusiones principales que se ha extraído ...
El sector sanitario español está sufriendo un desajuste de talento muy acuciado, estimado en el 82%, debido al crecimiento sostenido de esta industria y al cambio de competencias necesarias para desarrollar las labores que se precisan en la actualidad. Esta es una de las conclusiones principales que se ha extraído en el panel de expertos Capacidades y talento para una industria sanitaria sólida y resiliente en España y Europa que ha celebrado hoy, en el marco de Transfiere 2024, EIT Health Spain, el centro de Co-Localización (hub regional) de EIT Health, que forma parte del Instituto Europeo de Innovación y Tecnología (EIT), un organismo de la Unión Europea.
La mesa redonda, moderada por Ángeles Barrios, directora de Asuntos Públicos y Relaciones con Stakeholders de EIT Health Spain, ha contado con la participación de expertos de primer nivel, como Enrique J. Gómez, catedrático de la Universidad Politécnica de Madrid y presidente de la Sociedad Española de Ingeniería Biomédica (SEIB); Jordi Velasco, director de Proyectos Nacionales de LEITAT; Javier Colás, director del Clúster de Innovación Tecnológica y Talento en Tecnologías Biomédicas y Biotecnología de la Comunidad de Madrid; y Montse Delgado, Head of Entrepreneurship and Venture Builder en EIT Health.
La sanidad, un sector en auge en España y Europa
La industria sanitaria es una de las más grandes y de más rápido crecimiento a nivel mundial y juega un papel fundamental tanto a nivel económico como social. Según las cuentas nacionales y estadísticas empresariales de Eurostat, el ecosistema sanitario representa el 9,5% del valor añadido total en la UE 27, con un valor añadido bruto de aproximadamente 1,2 billones de euros. Proporciona alrededor de 24,8 millones de empleos directos a través de una variada gama de empresas, desde compañías globales a empresas innovadoras de nueva creación.
En España, las actividades económicas relacionadas con la salud generan un valor añadido bruto cercano a los 100.000 millones de euros, el 8,7% del PIB. Estudios recientes recogen que por cada euro invertido en investigación sanitaria (pública o privada), el resto del tejido productivo español genera 1,4 euros en valor añadido bruto (1,6 si se considera el efecto inducido). Además, por cada millón de euros invertido, se generan, de manera directa o indirecta, 13,7 puestos de trabajo (15,6 con el efecto inducido).
A medida que el ecosistema sanitario experimenta una rápida transformación impulsada por los avances tecnológicos, los cambios económicos y los cambios sociales, la demanda de profesionales cualificados va en aumento en toda la Unión Europea.
Además, tal y como apunta Montse Delgado, "Nos enfrentamos a un crecimiento del paciente crónico de un 67% en 2050, así como a un envejecimiento poblacional que disparará la demanda de productos y servicios en salud. No es viable pensar en soluciones sin escalar el talento que el sector requiere". En ese sentido, el ecosistema de EIT Health se encuentra en un punto neurálgico para ser parte de esa respuesta y aportar talento.
Los perfiles más buscados en una industria cambiante
La industria sanitaria se enfrenta a tres grandes retos con un impacto decisivo en su futura competitividad: el imparable desarrollo tecnológico, la transición digital y la transición verde. Para dar respuesta adecuada, el sector necesita profesionales capacitados que puedan comprender y aprovechar tecnologías como la IA, el big data o la robótica de manera efectiva. Tienen que mejorar las habilidades de sus empleados y apoyar la capacitación de nuevos profesionales que comprendan la gobernanza de datos, la integración de sistemas, la seguridad cibernética y las regulaciones de privacidad, entre otros aspectos. Y para adoptar prácticas sostenibles en la fabricación, el diseño y las cadenas de suministro, los productores precisan de experiencia en múltiples áreas: la química verde, la ingeniería sostenible, la evaluación del ciclo de vida, el abastecimiento sostenible, la compra éticas, la gestión de la energía, los asuntos regulatorios y la gestión de la I+D para impulsar la innovación y el despliegue de tecnologías verdes.
Los grandes retos de la innovación sanitaria pasan por optimizar el tiempo que emplean los profesionales en el uso de la tecnología, el cambio en la relación paciente-profesional sanitario, la búsqueda de la mejora de la experiencia con el sistema sanitario, la consecución de una medicina personalizada, predictiva y de precisión, y el análisis de los datos de salud para obtener indicadores de cuidado de la salud basados en valor, entre otros. "A ese objetivo se dedica la ingeniería biomédica", explica Enrique J. Gómez, "Los ingenieros biomédicos, en estrecha colaboración con los profesionales sanitarios, buscamos nuevas soluciones tecnológicas a métodos de diagnóstico, de terapia, de planificación quirúrgica, o de prevención de enfermedades", añade el catedrático de la Universidad Politécnica de Madrid.
"El conocimiento y la formación técnica especializada, la colaboración institucional interdisciplinar, la transferencia tecnológica y un claro enfoque a la internacionalización" son actualmente, en palabras de Jordi Velasco, los principales retos de competencias del sector tecnológico en la industria de la salud.
Asimismo, como se ha expuesto hoy en la mesa de expertos, hacer que la industria sanitaria resulte atractiva para los jóvenes talentos representa otro enorme desafío. En encuestas realizadas a graduados de escuelas de ingeniería e informática, estos no mencionaban a ninguna empresa del sector sanitario como posible empleador.
Para Javier Colás, "Más que nunca necesitamos mejorar la comunicación entre empresas y centros de formación, tanto en FP, como universidades y centros de superespecialización, para acompasar oferta y demanda y evitar dejar de ser interesantes para el establecimiento de industrias del sector en nuestro país".
El déficit de talento y competencias es especialmente preocupante, dado que este sector desempeña un papel crucial en la vida de 450 millones de ciudadanos de la UE y esta situación podría llegar a comprometer la prestación de servicios sanitarios, equipos médicos y medicamentos.
"Es preciso desarrollar e implementar una hoja de ruta para España en el marco de la UE para abordar las necesidades de competencias actuales y futuras en la industria de la salud", ha señalado Montse Delgado. "A través de acciones conjuntas y sinergias entre varios niveles territoriales (local, regional, nacional y europeo) podemos abordar eficazmente los desafíos y aprovechar las oportunidades en este sector", ha propuesto.
En el mismo sentido, Ángeles Barrios ha apuntado que "necesitamos un enfoque colectivo y multidimensional, que incluya inversiones en programas de capacitación y mejora de habilidades, colaboraciones con otros socios fuera de la industria y el fomento de una cultura de sostenibilidad e innovación en todo el ecosistema de la industria de la salud".
Una plataforma europea impulsará la renovación de la fuerza laboral
EIT Health Spain ha aprovechado su participación en Transfiere, el mayor foro europeo de ciencia, tecnología e innovación para dar a conocer The Skills Partnership for the European Health Industry, una plataforma creada a finales de 2023, impulsada por DG GROW y coordinada por EIT Health, con la ambición de crear una fuerza laboral sólida, capacitada y adaptable que respalde el crecimiento de la industria, fomente la innovación y garantice el suministro continuo de productos sanitarios de alta calidad.
El proyecto se ha creado con los objetivos de comprender las competencias actuales en el ecosistema de la industria de la salud, cerrar la brecha de competencias, mejorar la colaboración entre la industria de la salud y la universidad, promover el aprendizaje permanente y el desarrollo profesional continuo, fortalecer las alianzas público-privadas, combinar las oportunidades de financiación disponibles y mejorar el atractivo del sector.
"Si trabajamos todos juntos, los socios europeos podemos abordar desafíos comunes, aprovechando la experiencia colectiva y creando una fuente de talento sostenible para la industria sanitaria", apostilla Ángeles Barrios.