Un gen asociado con el cáncer colorrectal parece desempeñar también un papel en el desarrollo de otros tumores sólidos, según un estudio de más de 350.000 muestras de biopsias de pacientes realizado por investigadores del Centro Oncológico Kimmel de Johns Hopkins (Baltimore, EEUU). Desde principios de la década de 2000, los ...
Un gen asociado con el cáncer colorrectal parece desempeñar también un papel en el desarrollo de otros tumores sólidos, según un estudio de más de 350.000 muestras de biopsias de pacientes realizado por investigadores del Centro Oncológico Kimmel de Johns Hopkins (Baltimore, EEUU).
Desde principios de la década de 2000, los científicos saben que heredar dos copias mutadas del gen MUTYH aumenta 93 veces el riesgo de cáncer colorrectal y es una de las principales causas de ese cáncer en personas menores de 55 años. El nuevo estudio, publicado en ´JCO Precision Oncology´, es el análisis más grande hasta la fecha para investigar si una sola copia mutada de MUTYH también afecta el riesgo de desarrollar cáncer.
"Sabemos que dos copias faltantes de MUTYH aumentan en gran medida el riesgo de cáncer de colon, y ahora parece que faltar solo una copia puede aumentar ligeramente el riesgo de otros tipos de cáncer", dice el autor principal del estudio, director de investigación clínica del cáncer de próstata y profesor asociado de oncología en la Facultad de Medicina de la Universidad Johns Hopkins, Channing Paller.
El gen MUTYH codifica una enzima crítica en la vía de reparación por escisión de bases (BER), que repara el daño del ADN en las células humanas. Cuando la vía BER no funciona, el daño rutinario del ADN no se repara, lo que provoca mutaciones adicionales en el ADN o muerte celular.
Desde 2021, Paller colidera PROMISE, un registro genético de pacientes con mutaciones hereditarias en cáncer de próstata. Cuando uno de sus pacientes preguntó si su mutación MUTYH, de la que tenía una copia defectuosa en lugar de dos, afectaba su agresivo cáncer de próstata, no había suficientes datos sobre las variantes MUTYH para responder la pregunta, dice Paller. Estudios anteriores alcanzaron resultados contradictorios sobre si una única mutación heterocigótica de MUTYH podría predisponer a una persona al cáncer.
En busca de una respuesta, Paller se acercó a Foundation Medicine, una empresa de elaboración de perfiles genómicos con sede en Massachusetts que mantiene una de las bases de datos genómicas del cáncer más grandes del mundo. Con investigadores de Foundation Medicine; Alexandra Maertens, del Centro de Alternativas a la Experimentación con Animales de la Escuela de Salud Pública Bloomberg; y otros, el equipo aplicó un algoritmo avanzado para analizar los datos genéticos de 354.366 biopsias de tumores sólidos almacenadas en la base de datos de la Fundación.
Dentro de esa población de muestras de tumores, 5.991 tenían una versión funcional y una versión mutada de MUTYH. De ellos, 738 (alrededor del 12%) habían perdido su copia funcional del gen, dejándolos solo con la copia mutada. Aquellos con una única copia mutada de MUTYH mostraron una firma genética, como una huella digital, de mutaciones genéticas adicionales y una vía BER defectuosa.
Los individuos con esa firma genética tuvieron un modesto aumento en la susceptibilidad a un subconjunto de tumores sólidos, incluidos los cánceres de glándula suprarrenal y los tumores de células de los islotes pancreáticos. Sin embargo, no tenían un mayor riesgo de cáncer de mama o de próstata, lo que resolvió la pregunta del paciente original.
"Los resultados sugieren que las variantes de MUTYH podrían estar involucradas en una gama de cánceres más amplia de lo que se conocía anteriormente", dice Paller. "La siguiente pregunta es si este hallazgo tiene implicaciones terapéuticas. ¿Podemos apuntar a la vía BER para posibles sensibilidades a medicamentos?" De ser así, los médicos podrían añadir un nuevo enfoque terapéutico a su arsenal de herramientas contra los cánceres sólidos", añade.