Este 8 de abril, el Hospital Sant Joan de Déu y el Hospital Clínic Barcelona han dado a conocer el Centro de Cardiopatías Congénitas Barcelona, en el que se hará un seguimiento continuo y multidisciplinar de los pacientes con cardiopatías congénitas desde que nacen hasta la edad adulta. Manel Balcells, conseller ...
Este 8 de abril, el Hospital Sant Joan de Déu y el Hospital Clínic Barcelona han dado a conocer el Centro de Cardiopatías Congénitas Barcelona, en el que se hará un seguimiento continuo y multidisciplinar de los pacientes con cardiopatías congénitas desde que nacen hasta la edad adulta.
Manel Balcells, conseller de Salut de la Generalitat de Catalunya, ha explicado que ambos centros trabajarán de forma conjunta, "con un servicio conjunto de más de 23 profesionales que trabaja de forma solidaria, junta, única y con protocolos establecidas".
Mientras que la noticia es doble porque en este nuevo centro se aplica, por primera vez en España, la cirugía cardíaca robótica en pacientes pediátricos. "De esta forma, a la hora de tratar niños y adolescentes con esta enfermedad se hace con cirugía mínimamente invasiva y cirugía robótica, y esto es una novedad, algo pionero, con el fin de solucionar patologías congénitas cardiovasculares en pacientes más jóvenes". Pues, hasta el momento, los pacientes pediátricos con cardiopatías congénitas que debían pasar por quirófano eran intervenidos mediante cirugía abierta.
Tales centros trabajarán de forma conjunta como si fueran una sola entidad. E introduciendo nuevas herramientas y maneras de atender estos problemas, "avanzamos mucho en una gestión integrada, pues unos 600 pacientes al año nacen con esta enfermedad y necesitan tratamiento. Se tratan entonces en diversos hospitales de forma integrada".
La doctora Marta Sitges, directora de L´Institut Cardiovascular del Hospital Clínic de Barcelona, ha manifestado en esta rueda de prensa que se trata de un centro focalizado en esta enfermedad que quiere integrar lo mejor de cada casa "para dar respuesta a las cardiopatías congénitas, que ahora tienen una mayor supervivencia, donde la parte de cardiopatía del adulto ha evolucionado y ha permitido integrar técnicas mínimamente invasivas, e integrar fisioterapia, enfermería, para vivir más pero especialmente mejor". Según Sitges, se trata de una enfermedad prevalente e importante que implica la participación de diversos sanitarios, "queremos trabajar conjuntamente e incorporar esta tecnología en la edad pediátrica".
Daniel Pereda, director del Centro de Cardiopatías Congénitas Barcelona, ha explicado que las cardiopatías congénitas sin malformaciones comunes y presentes en el nacimiento. "En Catalunya nacen cada año más de 600 bebés afectados (5.000 en toda España) y un tercio necesita una intervención quirúrgica en el primer año de vida. La supervivencia hasta la edad adulta es del 85-90%".
Los principios de este nuevo centro se basan en la longitudinalidad y amplitud, la atención integrada, la generación y transmisión del conocimiento, la sinergia entre sedes, la superespecialización y la alta tecnología.
A su vez, Pereda ha remarcado que el Hospital Clinic es uno de los pocos centros que realiza intervenciones cardiacas robóticas en Europa y el único en España, dentro de un programa iniciado en 2019 con el total de 243 intervenciones realizadas.
Pereda también ha resaltado que no todos los pacientes con cardiopatías congénitas pueden ser operados con cirugía robótica, "hay un proceso de selección para que encontrar al candidato porque algunos adultos no pueden hacerlo debido a otras comorbilidades, depende de cada patología".
Se espera que puedan beneficiarse de esta cirugía robótica unos 12 pacientes pediátricos al año, "un 20% de tales cardiopatías congénitas se podrían hacer mediante este sistema robótico", ha añadido Pereda.
El nuevo centro de cardiopatías congénitas ya ha llevado a cabo cinco intervenciones de este tipo en niños. En tres casos, los profesionales han optado por una cirugía toracoscópica, que consiste en realizar unas pequeñas incisiones en el tórax del niño para introducir un dispositivo con una cámara de vídeo, que les permita ver la zona quirúrgica, y los utensilios necesarios para llevar la intervención. Y en los otros dos casos, los profesionales han optado por la cirugía cardíaca robótica