"El objetivo de la gestión es colocar los recursos, que son limitados, en el lugar adecuado para conseguir maximizar el valor o la rentabilidad para los pacientes, es decir, mejorar los resultados en salud y la calidad de vida al coste adecuado para el sistema" destaca Elisa Gómez Inhiesto, Estrategia ...
"El objetivo de la gestión es colocar los recursos, que son limitados, en el lugar adecuado para conseguir maximizar el valor o la rentabilidad para los pacientes, es decir, mejorar los resultados en salud y la calidad de vida al coste adecuado para el sistema" destaca Elisa Gómez Inhiesto, Estrategia de la Atención Basada en Valor en Osakidetza (Servicio Vasco de Salud), durante el I Foro de Gestores del Futuro: Apostando por el Talento Joven, organizado por la Fundación Española de Directivos de la Salud (Fundación SEDISA). A lo largo de este foro se han abordado temas como el futuro de la Gestión y el Sistema Sanitario, la innovación en la Gestión Económica y en la Compra Pública y la Transformación Digital Y "Data-Driven".
"Cuando hablamos de Gestión económica, tenemos que tener en cuenta el impacto de la actividad de nuestro Sistema Sanitario y la necesidad de transitar hacia un modelo de economía circular. Somos parte del problema climático y a la vez somos el sector que va a sufrir la presión asistencial por los efectos de la contaminación del agua y del aire y las enfermedades derivadas", destaca Gómez Inhiesto. Y es que, cuando hablamos de la Gestión Basada en Valor, "hablamos de eco- diseño de las prestaciones, de promoción de la salud y de utilizar alternativas en tecnologías médicas con menor impacto ambiental".
La utilización de las tecnologías está marcada por la gran transformación que están afrontando y el "Data Driven". En palabras de Julio Mayol Martínez, Jefe de Sección de Cirugía en el Hospital Clínico de Madrid y Catedrático de la UCM, "la transformación digital se encuentra en una etapa de aceleración constante impulsada por las innovaciones tecnológicas rápidas y la necesidad de adaptación a nuevos entornos digitales tanto en el ámbito laboral como en el personal. Está redefiniendo cómo interactuamos, trabajamos y conducimos".
Esta transformación trae consigo grandes retos como "la brecha digital, la ciberseguidad, la necesidad de habilidades digitales actualizadas y la ética en la IA. Además, las organizaciones y sociedades deben adaptarse a los cambios rápidos, lo que implica una reevaluación constante de estrategias y modelos de negocio para asegurar su relevancia y competitividad". Por ello, es necesario contar con personas jóvenes y es que "los nativos digitales aportan agilidad, adaptabilidad y una perspectiva fresca que es vital para la innovación. Su facilidad con la tecnología, combinada con su compromiso por un futuro sostenible y equitativo, los posiciona como líderes de la creación de soluciones digitales inclusivas y éticas. Deben impulsar el cambio hacia un uso más consciente y responsable de la tecnología en nuestra sociedad".