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El deporte femenino de alto rendimiento provoca un retraso en la maternidad

Según un estudio, más del 40% de las futbolistas profesionales de España declara que retrasarán su maternidad por ser deportistas de élite.

11/04/2024

A diferencia de otras profesiones, la carrera de una deportista de alto rendimiento no está solo sujeta a horarios y largas jornadas de exigencia física y entrenamiento, sino también a un estilo de vida disciplinado para garantizar un alto rendimiento. Esto, en algunas ocasiones, puede convertirse en un motivo para ...

A diferencia de otras profesiones, la carrera de una deportista de alto rendimiento no está solo sujeta a horarios y largas jornadas de exigencia física y entrenamiento, sino también a un estilo de vida disciplinado para garantizar un alto rendimiento. Esto, en algunas ocasiones, puede convertirse en un motivo para posponer proyectos personales e incluso familiares por la carencia de tiempo o el miedo a tener que renunciar a metas deportivas, como ocurre con la maternidad.

De hecho, un estudio realizado por la Asociación de Futbolistas Profesionales (FUTPRO), cuyo fin es trabajar por mejorar los derechos de las futbolistas, señala que más del 40% de las jugadoras españolas de fútbol profesional retrasarán su maternidad por ser deportistas de élite. Una muestra de que muchas deportistas profesionales que desean ser madres optan por priorizar su carrera deportiva y postergar su maternidad. Lo anterior se debe, en parte, a que los años de máximo rendimiento deportivo suelen coincidir con la etapa más fértil en la vida de la mujer.

Sobre esto, la Dra. Mónica Aura Masip, directora médica de Ginefiv Barcelona, explica que "sea cual sea la decisión de una mujer sobre su maternidad y su carrera profesional o deportiva, debemos recordar que, en términos de fertilidad, la edad continúa siendo el factor biológico más determinante a la hora de conseguir un embarazo, especialmente si la mujer decide postergar su maternidad. Sabemos que los 35 años es una edad clave a partir de la cual será más complicado conseguir el embarazo de forma natural, y lo vemos en deportistas que han acudido a nuestros centros".

A pesar de ello, añade, ambas facetas de la vida de la mujer no tienen por qué ser incompatibles. Así, la especialista en reproducción asistida recuerda que "la preservación de la fertilidad a través de la vitrificación de ovocitos en edad fértil es una gran opción para las deportistas de alto rendimiento que desean continuar con su carrera deportiva sin renunciar a la maternidad en el futuro". Con ello, explica, "conseguimos disponer de ovocitos de edad más joven para usarlos en el momento que la mujer decida iniciar su proyecto de maternidad". Su principal importancia es que, a medida que avanza la edad de la mujer, la genética del óvulo y otras estructuras de este se van alterando, lo que deriva en una mayor probabilidad de embriones con alteraciones cromosómicas, menor capacidad de desarrollo y/o un mayor riesgo de aborto. Frente a esta realidad, "si una mujer congela sus óvulos entre los 25 y los 30 años, en plena edad fértil, y decide utilizarlos a una edad posterior, estos conservarán la misma capacidad fértil y calidad que el día que tomó la decisión de preservarlos", concluye la experta de Ginefiv.

La práctica de ejercicio moderado permite cuidar la salud reproductiva

De forma paralela, para las mujeres con diferentes carreras profesionales, se ha comprobado que un estilo de vida saludable, conformado por una rutina de ejercicio físico regular y moderado, puede favorecer la fertilidad femenina, mejorando la calidad de vida, reduciendo los niveles de estrés, ayudando a controlar el peso y manteniendo el cuerpo activo. Sobre esto, la Dra. Aura Masip asegura que "tanto su práctica en exceso como el sedentarismo pueden ser contraproducentes a la hora de buscar un embarazo o planificar un proyecto de maternidad ya que, en las mujeres, ambas situaciones pueden provocar desequilibrios hormonales que alteren la ovulación y aumentar el estrés oxidativo celular".

En este sentido, los datos analizados por Ginefiv en la encuesta "Conocimientos y hábitos de la fertilidad de las mujeres" entre 2018 y 2023 arrojan tendencias estables en la práctica de ejercicio físico de las españolas. Solo entre un 10% y un 15% de las encuestadas en cada edición del estudio declaró no practicar deporte y más de un 40% solo hacerlo ocasionalmente. En el extremo opuesto, aproximadamente el 5% de las mujeres realizan ejercicio diario, descendiendo ligeramente hasta el 4,5% en 2023.

"Es muy positivo que el mayor porcentaje de mujeres haya incorporado de forma constante la práctica deportiva en sus rutinas diarias, pero deben vigilar la intensidad de ese ejercicio físico", matiza la especialista. En este sentido, aunque otros factores como los altos niveles de estrés o los cambios bruscos de peso también pueden derivar en amenorrea, la experta recomienda a las mujeres que están buscando un embarazo o realizando un tratamiento de fertilidad "cuidarse de forma equilibrada para mantener un buen estado de salud reproductiva; incorporando una rutina de deporte moderada que no exceda las cuatro horas de ejercicio físico a la semana; controlando la alimentación con una dieta variada en verduras, frutas, legumbres y pescado, y priorizando la calidad y horas de sueño".

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