El cáncer colorrectal (CCR), uno de los cánceres más frecuentes, se inicia, por lo general, a partir de un crecimiento glandular no canceroso en las células epiteliales de la mucosa colorrectal, y acaba transformándose en cáncer a través de la secuencia adenoma-carcinoma. De ahí que las lesiones colorrectales de ≥10 ...
El cáncer colorrectal (CCR), uno de los cánceres más frecuentes, se inicia, por lo general, a partir de un crecimiento glandular no canceroso en las células epiteliales de la mucosa colorrectal, y acaba transformándose en cáncer a través de la secuencia adenoma-carcinoma. De ahí que las lesiones colorrectales de ≥10 mm presentan un mayor riesgo de progresar a malignidad y su extirpación completa es considerada crucial para prevenir la progresión a CCR.
Sin embargo, alrededor del 19% de los cánceres de intervalo, tras el cribado, se atribuyen a resecciones incompletas, lo que es particularmente significativo en el caso de pólipos más grandes.
Endoscopia, herramienta útil
Al respecto, el desarrollo y perfeccionamiento de las técnicas de resección endoscópica se han vuelto imprescindibles en el campo de la endoscopia gastrointestinal. En estos casos, la endoscopia ofrece un enfoque mínimamente invasivo para extirpar este tipo de pólipos, lo que reduce la necesidad de cirugía tradicional.
Este método tiene como objetivo erradicar los adenomas, el cáncer intramucoso o el cáncer temprano con invasión submucosa superficial inferior a 1000 µm. Alternativamente, puede servir como herramienta de diagnóstico para estadificar y determinar el abordaje quirúrgico o no quirúrgico apropiado.
En la revista ´eGastroenterology´ se ha publicado una revisión de los principales avances en las técnicas de resección endoscópica, específicamente la resección endoscópica de la mucosa (REM) y la disección endoscópica submucosa (ESD). Tanto la REM como la ESD ofrecen ventajas sobre la cirugía. Son menos invasivos, requieren tiempos de recuperación más cortos y se asocian con menos complicaciones.
La REM, el método estándar para pólipos grandes no pediculados, se ha convertido en el tratamiento de elección de atención en lugar de la resección quirúrgica debido a una probabilidad muy alta de extirpación curativa. Su empleo conlleva una inyección submucosa para crear un cojín, lo que permite una resección más segura y completa con un asa. Mientras, la ESD se considera una técnica más avanzada y dirigida a pólipos complejos con mayor riesgo de invasión submucosa. Su aplicación implica crear una incisión precisa y una disección del pólipo, capa por capa, sobre el tejido subyacente.
Sin embargo, seleccionar la técnica más adecuada depende de varios factores, incluido el tamaño, la morfología, la ubicación y la profundidad de la invasión submucosa del pólipo. En general, se prefiere la REM para los pólipos más simples, mientras que la ESD está indicada para aquellos con características que sugieren una invasión más profunda.
La elección entre REM y ESD debe individualizarse según las necesidades específicas del paciente, las características del pólipo y la experiencia disponible en el centro de tratamiento. En algunos casos, particularmente en instalaciones con experiencia limitada en ESD o cuando los retrasos debido a procedimientos complejos podrían superar los beneficios, la REM está considerada como el enfoque preferido.
Las investigaciones en curso, según los autores de este trabajo, perfeccionarán estas técnicas y guiarán las decisiones de tratamiento óptimas para pacientes con lesiones colorrectales precancerosas.