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Un marcador de la médula ósea se asocia a peor pronóstico en el mieloma múltiple

Investigadores revelan el valor del microambiente tumoral en la predicción de la supervivencia en pacientes de nuevo diagnóstico.

23/04/2024

Un estudio de la Universidad Médica de Harbin indica que la expresión elevada de CD27 en los linfocitos T de la médula ósea es un factor pronóstico desfavorable en el mieloma múltiple. A la finalización de la terapia con bortezomib, los pacientes que al inicio presentaron una proporción de linfocitos ...

Un estudio de la Universidad Médica de Harbin indica que la expresión elevada de CD27 en los linfocitos T de la médula ósea es un factor pronóstico desfavorable en el mieloma múltiple. A la finalización de la terapia con bortezomib, los pacientes que al inicio presentaron una proporción de linfocitos T CD27+ inferior al 20% respondieron mejor al tratamiento, con una tasa de respuesta objetiva de más del 80%, en contraste con el 55% alcanzado en los pacientes en los que esta población linfocitaria superó el 20%. En este último grupo la frecuencia de ineficacia de la terapia fue más de dos veces mayor, según afirma Lina Quan, codirectora del estudio.

La científica prosigue indicando que el mayor nivel de CD27 fue factor predictivo independiente de menor supervivencia global y libre de progresión. En consonancia con los resultados de estudios previos, los investigadores constataron que los niveles decrecientes de CD27 reflejan la progresión de la gammapatía monoclonal hacia el mieloma múltiple, asociándose además al relapso y a un estadio más avanzado del mieloma. Del examen de diversas bases de datos sobre interacciones entre proteínas, los científicos también han deducido que el CD27 representa un nodo central en la red que controla la patofisiología de este cáncer hematológico. Quan señala que la composición inmunológica del microentorno tumoral mostró diferencias en función de la proporción de células CD27+, asociándose la baja expresión de esta molécula a mayor cantidad de linfocitos T CD4+ de memoria inactivos y menor de células dendríticas. En su conjunto, los hallazgos ponen de manifiesto el potencial clínico del CD27 en los cánceres hematológicos, concluyen los autores.  

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