El tejido adiposo es el principal órgano de almacenamiento del exceso de energía a través de lípidos llamados triglicéridos que se componen de ácidos grasos libres. Cuando hay exceso de energía, la insulina disminuye la descomposición de los triglicéridos (lipólisis) y la liberación de ácidos grasos libres a la sangre ...
El tejido adiposo es el principal órgano de almacenamiento del exceso de energía a través de lípidos llamados triglicéridos que se componen de ácidos grasos libres. Cuando hay exceso de energía, la insulina disminuye la descomposición de los triglicéridos (lipólisis) y la liberación de ácidos grasos libres a la sangre y aumenta el almacenamiento de energía en forma de triglicéridos (lipogénesis) en las células grasas.
En la resistencia a la insulina, las células grasas son menos sensibles a la insulina y, por lo tanto, ambos procesos se ven afectados. Esto puede provocar que circule más grasa en el torrente sanguíneo, lo que aumenta el riesgo de diabetes tipo 2. Los ácidos grasos en el torrente sanguíneo tienen efectos en el hígado, los músculos y el páncreas y podrían provocar una mayor resistencia local a la insulina en estos órganos, creando un círculo vicioso que, con el tiempo, podría conducir al desarrollo de diabetes tipo 2.
Un nuevo estudio en este terreno responde a cómo el tejido adiposo de cada sexo se comporta ante la insulina y podría ayudar a explicar por qué la diabetes tipo 2 es más común en hombres que en mujeres. La investigación ha sido presentada en el Congreso Europeo sobre Obesidad (ECO) que se celebra estos días en Venecia, y ya ha sido publicada en el ´International Journal of Obesity´.
"Estudios anteriores han demostrado que los hombres desarrollan diabetes tipo 2 (TD2) a una edad más temprana y con un peso inferior al de las mujeres. Una razón para esto puede encontrarse en las diferencias existentes en cómo el tejido adiposo de cada sexo responde a la insulina, según el investigador principal de dicho trabajo, el Dr. Daniel P. Andersson, del Departamento de Endocrinología del Hospital Universitario Karolinska Huddinge (Suecia). "Si la resistencia a la insulina de las células adiposas es más pronunciada o grave en los hombres que en las mujeres, esto podría ayudar a explicar por qué la diabetes tipo 2 es más común en hombres que en mujeres", agregó.
Diferencias de género
Las diferencias observadas en este estudio entre hombres y mujeres se relacionaron principalmente con una menor capacidad de la insulina para bloquear la descomposición de los ácidos grasos en las células grasas de los hombres, más que en la capacidad de almacenamiento. "Al observar las diferencias de sexo, encontramos que los hombres que padecen obesidad tenían una mayor resistencia a la insulina en el tejido adiposo y niveles más altos de ácidos grasos libres en la sangre", indicó el Dr. Andersson.
Los investigadores concluyen que la resistencia a la insulina del tejido adiposo, en las personas que sufren obesidad, es más grave en los hombres que en las mujeres, lo que podría explicar, en parte, por qué la diabetes tipo 2 es más común en los varones."En las personas que viven con obesidad, a menudo hay un exceso de energía disponible en el cuerpo y la insulina debería disminuir la liberación de ácidos grasos y aumentar el almacenamiento de lípidos en el tejido adiposo para reducir los ácidos grasos libres que circulan en la sangre", concluyó este experto.