El pasado mes de marzo, el Hospital Universitario Infanta Sofía; en concreto, el equipo multidisciplinar del área de Geriatría y Urgencia, recibía el reconocimiento de ser incluidos en el Programa GEDA (Geriatric Emergency Department Accreditation), una acreditación que valora y reconoce el compromiso del centro con la mejora de la atención a las personas mayores en el servicio de urgencias. Esta acreditación, otorgada por el Colegio Americano de Médicos de Urgencia ACEP, respaldado por el Instituto de Salud Gary and Mary WEST y la Fundación John A. Hartford, establece estándares y criterios para garantizar una atención especializada y de calidad a este grupo de pacientes.

Para el centro, explica el doctor Rafael Bielza, jefe de Geriatría del Hospital Universitario Infanta Sofía, esta acreditación representa "un reconocimiento a su excelencia en el cuidado de personas mayores, reflejado en la implementación de iniciativas geriátricas específicas destinadas a elevar el nivel de atención en áreas clave".

El jefe de Geriatría reconoce que el hospital ha trabajado "diligentemente" para obtener esta acreditación, y para ello, ha implementado "medidas preventivas y de mejora en la atención a las personas mayores en el servicio de urgencias". "Destaca -matiza el doctor Bielza- por su enfoque en la prevención del delirium, nutrición, deterioro funcional y sondajes vesicales, así como por la creación de un circuito y ubicación específico en la sala B del servicio de urgencias para pacientes mayores de 80 años".

De hecho, en ese sentido, los objetivos principales que el centro hospitalario se plantea a la hora de atender a las personas mayores están enfocados en "la prevención del delirium, la promoción de la nutrición adecuada, la preservación del funcionamiento físico y cognitivo, y la mejora de la experiencia global del paciente en el servicio de urgencias".

Además, a ello se le suma que el centro ha realizado cambios estructurales cuyo objetivo es "garantizar una atención integral, como la instalación de sillones geriátricos, dotación de andadores y bastones, y la implementación de recursos educativos para pacientes y familiares".

Atención integral y especializada a los mayores

El Hospital Universitario Infanta Sofía realiza un trabajo enfocado en proporcionar una atención integral y especializada a los mayores, destacando un enfoque "preventivo", así como "la implementación de medidas específicas para mejorar la calidad de la atención en el servicio de urgencias". En comparación con otros centros sanitarios, el hospital se distingue, añade el médico, "por su dedicación a las necesidades particulares de este grupo de pacientes y su compromiso con la excelencia en el cuidado geriátrico".

En esa línea, el proyecto GEDA es un reconocimiento que avala el manejo y tratamiento de los pacientes de mayor edad en el servicio de urgencias brindando una atención calificada de excelente por la implementación de medidas encaminadas a mejorar la eficiencia de cuidados y evitar complicaciones. "Este proyecto permite fomentar vínculos intergeneracionales al involucrar a jóvenes en actividades educativas y de acompañamiento a las personas mayores en el servicio de urgencias", detalla el doctor Rafael Bielza, quien, además, en este sentido, explica que también se está buscando "involucrar a estudiantes de Medicina y a voluntarios de Cáritas, aunque queda mucho camino que recorrer todavía".

Durante el acto en el cual el hospital recibió este reconocimiento, la directora general de Humanización de la Comunidad de Madrid, Celia García Menéndez, y el director gerente del Hospital, Antonio Romero Plasencia, ambos presentes en dicho acto, señalaron cómo este avance es "muy significativo en el cuidado y la atención que se presta a nuestros mayores". 

"La aplicación del protocolo que se lleva a cabo en este centro sanitario redunda en un claro beneficio para la salud de los adultos mayores, los más frágiles y vulnerables", apuntaron en ese momento. Además, destacaron que las medidas implementadas buscan trabajar para mejorar los resultados. Es el ejemplo de la cifra que sitúa en un 27% el número de personas mayores dadas de alta a domicilio que visitan de nuevo urgencias, reingresan o fallecen dentro de los tres meses posteriores al alta. Una cifra que constituye "una sólida evidencia de que estos actos clínicos actúan a menudo como un evento precipitante de discapacidad".

Planes enfocados a la Atención Integral en Longevidad y Fragilidad

A nivel político, en los últimos años se han anunciado planes enfocados a la Atención Integral en Longevidad y Fragilidad, con acciones como la adaptación de los servicios de Urgencias en los centros hospitalarios a las necesidades de los mayores. A este respecto, desde el Hospital Universitario Infanta Sofía se han llevado a cabo "activamente" acciones enfocadas a estas medidas a través del programa GEDA. Se trata de medidas y planteamientos "que se alinean con estos objetivos políticos al establecer estándares y criterios específicos para la atención de personas mayores en situaciones de emergencia". "Me consta que otros centros están trabajando también de manera intensa al respecto", añade el facultativo.

Estas medidas se han llevado a cabo priorizando las necesidades más importantes que manifiesta el cuidado y la atención de las personas mayores. "Estas necesidades prioritarias en la atención a los mayores incluyen la prevención de complicaciones relacionadas con la edad, la promoción de la independencia funcional, la gestión de enfermedades crónicas y la mejora de la experiencia del paciente en el entorno hospitalario, asegurando un trato respetuoso y compasivo", añade el especialista.

Además de estas acciones, el doctor Bielza destaca la importancia "del trabajo interdisciplinario", así como de la colaboración entre diferentes especialidades médicas y equipos de atención "para brindar una atención integral y centrada en el paciente a las personas mayores en el servicio de urgencias".

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