Presión arterial elevada persistente, proteínas en la orina y daño a los órganos son algunas de las complicaciones a las que se enfrentan mujeres embarazadas diagnosticadas con preeclampsia, trastorno que afecta a una media de entre cinco y ocho por ciento de todos los embarazos. Sin embargo, el problema con termina ...
Presión arterial elevada persistente, proteínas en la orina y daño a los órganos son algunas de las complicaciones a las que se enfrentan mujeres embarazadas diagnosticadas con preeclampsia, trastorno que afecta a una media de entre cinco y ocho por ciento de todos los embarazos. Sin embargo, el problema con termina con el parto, ya que las afectadas tienen el doble de probabilidades de desarrollar problemas cardíacos en el futuro.
Sobre esta materia versa una investigación llevada a cabo por miembros de la Universidad de Alberta (Canadá), cuyo objetivo es llegar a ampliar conocimientos para comprender el motivo y desarrollar estrategias de prevención.
La investigación parte de que las mujeres embarazadas tienen niveles más altos de colesterol, necesarios para favorecer la producción de hormonas y el desarrollo fetal. Sin embargo, en un grupo de estas mujeres, los niveles de colesterol se disparan excesivamente, lo que provoca preeclampsia. Los investigadores están analizando los procesos que sucenden en los vasos sanguíneos de las madres con esta afección, tanto durante como después del embarazo. Para su investigación preclínica utilizaron ratas preñadas con una dieta anormalmente alta en colesterol para imitar la afección en las mujeres.
Proteína sospechosa
En este escenario, observaron que una proteína del sistema inmunológico llamada receptor tipo peaje 4 (TLR4), cuando se activa, puede provocar una disfunción de los vasos sanguíneos. Uno de los objetivos de estos investigadores es desarrollar posibles estrategias de prevención. Teniendo en cuenta la proteína del sistema inmunológico 4 (TLR4) podría ser posible desarrollar una terapia que podría apuntar al receptor para prevenir el desarrollo de preeclampsia.
"Todavía estamos hablando de investigación preclínica, pero estamos tratando de comprender el mecanismo y, una vez logrado, tendremos una mejor idea de cómo avanzar al respecto", indicó Amanda de Oliveira, investigadora del laboratorio de Sandra Davidge en el Departamento de Obstetricia y Ginecología de la citada Universidad.