Aproximadamente, 1,6 millones de personas en todo el mundo caen enfermos debido al consumo de alimentos nocivos, según datos de la Organización Mundial de la Salud, difundidos con motivo de la celebración del ´Día Mundial de la Seguridad Alimentaria´, que se celebra este viernes, 7 de junio.

Las principales víctimas de este consumo son los niños menores de cinco años, estimándose que representan el 40 por ciento sobre el total de afectados. Por lo general, corren un mayor riesgo de desnutrición y mortalidad debido a alimentos insalubres.

Como se recuerda desde la OMS, los incidentes de seguridad alimentaria producen un riesgo para la salud potencial o confirmado asociado con el consumo de alimentos. Un incidente alimentario puede ocurrir, por ejemplo, debido a accidentes, controles inadecuados, fraude alimentario o eventos naturales.

Si bien estar preparado para gestionar los incidentes de inocuidad de los alimentos requiere esfuerzos dedicados por parte de los formuladores de políticas, las autoridades de inocuidad de los alimentos, los agricultores y los operadores de empresas alimentarias, los consumidores también pueden desempeñar un papel activo. Es por ello que el lema elegido para la conmemoración de este año subraya la importancia de estar preparado para incidentes de seguridad alimentaria, sin importar cuán leves o graves puedan ser.

Principales riesgos

Los incidentes de inocuidad de los alimentos que requieren intervención para proteger la salud de los ciudadanos pueden variar desde eventos menores hasta crisis importantes. Y como los peligros no tienen en cuenta las líneas que los humanos dibujan en los mapas, un suministro mundial de alimentos cada vez más interconectado significa que los riesgos que plantean los alimentos inseguros tienen el potencial de evolucionar rápidamente de un problema local a una emergencia internacional.

La forma en la que los alimentos se producen, almacenan, manipulan y consumen, afecta a su inocuidad. Cumplir con las normas alimentarias mundiales, establecer regulaciones de control de alimentos eficaces que incluyan preparación y respuesta ante emergencias, proporcionar acceso a agua potable, aplicar buenas prácticas agrícolas (terrestres, acuáticas, ganaderas y hortícolas), fomentar el uso de sistemas de gestión de la inocuidad alimentaria por parte de los operadores de las empresas alimentarias y educar al consumidor en la elección de alimentos sanos, son algunas de las formas en las que los gobiernos, las organizaciones internacionales, los científicos, el sector privado y la sociedad civil trabajan para garantizar la inocuidad de los alimentos.

La Asamblea General de las Naciones Unidas estableció el Día Mundial de la Seguridad Alimentaria en 2018 para crear conciencia sobre la importancia de la seguridad alimentaria. Es por ello que la OMS y la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) trabajan de manera conjunta, a través de una red global de autoridades nacionales de seguridad alimentaria, para facilitar el rápido intercambio de información a través de fronteras y entre miembros, registrando cientos de incidentes de seguridad alimentaria cada año.