Científicos de la Universidad Médica de Harbin han establecido que los pulmones trasplantados en ratas diabéticas pueden ser protegidos del daño isquémico mediante la administración de una única dosis intravenosa de metformina, inmediatamente después de la reperfusión del órgano. El tratamiento mejoró diversos parámetros ventilatorios, atenuando además el edema intersticial, ...
Científicos de la Universidad Médica de Harbin han establecido que los pulmones trasplantados en ratas diabéticas pueden ser protegidos del daño isquémico mediante la administración de una única dosis intravenosa de metformina, inmediatamente después de la reperfusión del órgano. El tratamiento mejoró diversos parámetros ventilatorios, atenuando además el edema intersticial, la hemorragia intraalveolar, el daño difuso, la permeabilidad capilar, el grado de infiltración por células inmunitarias y, notablemente, los cambios morfológicos deletéreos en las mitocondrias, orgánulos esenciales en la supervivencia del tejido trasplantado.
Wenzhi Li, director del estudio, afirma que a estos beneficios se sumó la reducción de la respuesta inflamatoria y del estrés oxidativo, con dramáticas reducciones en los niveles de las principales citoquinas proinflamatorias, tanto en circulación como en el fluido broncoalveolar, y de las especies reactivas del oxígeno. En consonancia con esta última observación, los investigadores constataron una importante reducción en los niveles tisulares de malondialdehído, reconocido biomarcador de daño membranal por peroxidación lipídica. Li prosigue indicando que la terapia redujo en el tejido trasplantado la expresión de proteínas vinculadas a la necroptosis, un tipo de muerte celular programada.
El científico señala que, aunque la isquemia seguida de reperfusión es un procedimiento inevitable en el trasplante de órganos, es también la principal causa de disfunción de los mismos, lo que se asocia a una elevada morbi-mortalidad. Este riesgo es más elevado en los pacientes con diabetes mellitus que reciben trasplante de pulmón, lo que impone la necesidad de identificar terapias preventivas, concluye Li.