La investigación sobre las diferencias entre los jóvenes y los mayores, y qué biomarcadores reflejan los diversos procesos biológicos que subyacen al envejecimiento, supone un campo actual y de rápido crecimiento. En este sentido, los relojes biológicos proporcionan un medio para evaluar si una molécula, una célula, un tejido o ...
La investigación sobre las diferencias entre los jóvenes y los mayores, y qué biomarcadores reflejan los diversos procesos biológicos que subyacen al envejecimiento, supone un campo actual y de rápido crecimiento. En este sentido, los relojes biológicos proporcionan un medio para evaluar si una molécula, una célula, un tejido o incluso un organismo completo es viejo o joven.
Al respecto, miembros del Instituto de biología molecular (IMB) y de la Universidad Johannes Gutenberg de Mainz (Alemania), han hallado una nueva forma de medir el envejecimiento y el riesgo de enfermedades, utilizando el reloj de agregación de proteínas, según explican en un estudio publicado en ´Nature Cell Biology´.
El trabajo, a cargo de los Prof. Dorothee Dormann y el profesor Edward Lemke de la Universidad Johannes Gutenberg de Mainz (JGU), que también son directores adjuntos del Instituto de Biología Molecular (IMB) de Mainz. Aunque existen otros "relojes" para medir el envejecimiento y la salud, la mayoría de ellos se basan en ácidos nucleicos como el ADN, estos expertos creen que un reloj biológico basado en proteínas sería un complemento útil a estos relojes existentes, ya que las proteínas se encuentran entre las moléculas más abundantes en las células y son cruciales para todas las funciones celulares.
Un cambio importante, a medida de que el organismo envejece, es que las proteínas que contienen las células a veces pueden plegarse mal y agruparse para formar agregados, conocidos también como amiloides. El plegamiento incorrecto y la agregación pueden ocurrirle a cualquier proteína, pero un grupo específico de proteínas conocidas como proteínas intrínsecamente desordenadas (IDP) son especialmente propensas a formar amiloides.
Indicadores de células enfermas
Los agredados constituyen alrededor del 30% de las proteínas de las células humanas y se caracterizan por no tener una estructura fija. En cambio, estas son flexibles y dinámicas, con fáciles movimientos. Los agregados formados a partir de desplazados internos tienden a acumularse en muchas células de larga vida (como las neuronas o las células musculares) a medida que se desencadena el envejecimiento.
De ahí que tener muchos agregados en una célula podría ser un indicador del estado enfermo de la célula o si es probable que una persona desarrolle pronto una enfermedad relacionada con la edad. Al respecto, los prof. Dormann y Lemke proponen que la agregación de desplazados internos podría usarse como un "reloj" biológico para medir la salud y la edad de una persona. Desde su punto de vista, "los médicos podrían utilizarlo para ayudar a diagnosticar enfermedades relacionadas con la edad en etapas muy tempranas o identificar a personas que aún no están enfermas pero que tienen un mayor riesgo de desarrollar enfermedades a medida que envejecen. En segundo lugar, los científicos podrían utilizarlo para evaluar los efectos de nuevos tratamientos experimentales para reducir la agregación de proteínas con el fin de prevenir o retrasar patologías relacionadas con la edad",
Estos científicos esperan que se pueda dar un paso más para ayudar a las personas a envejecer de forma saludable y prevenir enfermedades relacionadas con la edad. "Somos optimistas de que en el futuro podremos superar los desafíos actuales de leer un reloj de agregación de proteínas a través de más investigaciones sobre la dinámica de los desplazados internos y realizando más desarrollos tecnológicos", concluyó la prof. Dormann.