La Fundación SOS Lyme ha acordado con la Sociedad Española de Médicos Generales y de Familia (SEMG) que formará a sus socios en la enfermedad de Lyme para ayudar a prevenir el incremento de los casos de Lyme debido a la proliferación de garrapatas. Se trata de un paso más de las acciones conjuntas que llevan a cabo ambas organizaciones en la campaña SOS Garrapatas, en la que se ofrecen materiales divulgativos sobre garrapatas y Lyme a la población general, profesionales sanitarios y escolares.    

El Ministerio de Sanidad y diversas comunidades autónomas han emitido alertas sanitarias por las mordeduras de garrapatas, que se están multiplicando en el campo, jardines y parques de las ciudades. Desde SOS Lyme se ofrece ayuda desinteresada a las autoridades sanitarias para prevenir la mordedura de garrapatas y, una vez, que se ha producido, evitar que pueda derivarse en un Lyme crónico.

"A pesar de que el Lyme crónico está aumentando en todo el mundo debido la proliferación de garrapatas, los pacientes tardan varios años en disponer de un diagnóstico, ya que a menudo se confunde con otras enfermedades y el enfermo tiene un diagnóstico incompleto y con frecuencia acaba en el psiquiatra. Por eso se le llama la gran imitadora", explica el doctor Mariano Bueno, presidente de la Fundación SOS Lyme y director médico de Biosalud Day Hospital. 

Un estudio publicado este mes en la revista Clinical Microbiology and Infection determinó que el síntoma más común en los pacientes con Lyme crónico tres meses antes de recibir el diagnóstico era el dolor. Para los investigadores, que analizaron toda la población danesa diagnosticada de Lyme, al ser el dolor un síntoma ambiguo "puede contribuir a los retrasos en el establecimiento del diagnóstico correcto", ya que los pacientes deambulan antes por muchas especialidades médicas. La más frecuente fue medicina de familia, seguida de neurología y medicina interna. Los mismos autores, en un estudio publicado el mes pasado en Tick-Borne Diseases, detectaron que tres meses antes del diagnóstico se producía un aumento del consumo de analgésicos. 

"Creemos que es importante que el médico de Atención Primaria sepa detectar los síntomas de la enfermedad de Lyme a tiempo para evitar que se convierta en un Lyme crónico, que tiene consecuencias muy graves en la calidad de vida de los pacientes", advierte Julia María Ruiz, coordinadora del grupo de Salud Pública de SEMG. Por ese motivo, el acuerdo con SOS Lyme les permitirá actuar tanto en las primeras fases de la enfermedad, cuando se produce la infección, como en las fases más avanzadas, cuando se cronifican el dolor, la fatiga y la inflamación y la enfermedad se confunde con otras como fibromialgia, fatiga crónica y artritis reumatoide. "Se requieren pruebas muy especializadas para su diagnóstico, ya que las habituales con las que se diagnostican las infecciones son en el 85% de los casos negativas, por la inmunosupresión que padece el paciente", afirma el Dr. Mariano Bueno.

La enfermedad de Lyme es una patología infecciosa y multiorgánica transmitida a través de la mordedura de garrapatas, picaduras de mosquitos, pulgas, chinches u otros insectos infectados por la bacteria Borrelia burgdorferi y sus coinfecciones. Si no se aplican las medidas de contención temprana puede derivar en un Lyme crónico y grave, que puede causar incluso la muerte. 

El Lyme se puede curar

Una vez confirmado el diagnóstico clínico de Lyme y realizados los análisis de sangre seleccionados en cada caso por un médico experto, "es importante aplicar un tratamiento lo antes posible para que la enfermedad no avance y destruya o debilite el sistema inmune. En muchos casos se puede llegar a curar, pero es un proceso largo que requiere de la combinación de diversos tratamientos", señala el doctor Bueno. 

El pasado mes de abril se presentó la campaña SOS Garrapatas puesta en marcha por la Fundación SOS Lyme, y a la que se sumaron la SEMG, el Foro Aragonés de Pacientes, el Ayuntamiento de Zaragoza y el Colegio de Veterinarios de Zaragoza. El objetivo es educar sobre las medidas preventivas y aumentar la sensibilización ante los síntomas de alarma que indican una posible mordedura.