Investigadores de diversos centros en China han elaborado un protocolo para el aislamiento de células madre mesenquimales de médula ósea que expresan el antígeno neuroglial 2 (NG2+). Una única administración intravenosa de estas células a los 6 días de la inducción de la fibrosis hepática en ratones potenció la regeneración ...
Investigadores de diversos centros en China han elaborado un protocolo para el aislamiento de células madre mesenquimales de médula ósea que expresan el antígeno neuroglial 2 (NG2+). Una única administración intravenosa de estas células a los 6 días de la inducción de la fibrosis hepática en ratones potenció la regeneración funcional, en mayor medida que las células madre control. La superioridad de la terapia sería consecuencia de la singular capacidad de las NG2+ de diferenciarse en células del ducto biliar, según afirma Lianhua Bai, científico de la Universidad de Chongqing y director del estudio.
Éste también demostraría por primera vez que las NG2+ generan células endoteliales sinusoidales hepáticas, esenciales en la reconstrucción de los vasos en este órgano y en la regeneración de los hepatocitos. En experimentos adicionales ex vivo se confirmó que las NG2+ inician su diferenciación en respuesta a estímulos procedentes del tejido dañado. Bai señala que el mismo protocolo puede ser utilizado para generar células humanas NG2+, con propiedades terapéuticas similares a las de ratón.
Ello implica que las NG2+ humanas aisladas mediante este protocolo representan un nuevo precursor de origen no hepático, con potencial para tratar la fibrosis y la cirrosis en pacientes, asegura el investigador.
Bai concluye indicando que, a diferencia de las células madre convencionales derivadas de la misma localización anatómica, las NG2+ exhiben mayor capacidad proliferativa y mayor expresión de un antígeno característico de las células madre embrionarias, rasgo que acentúa su capacidad regenerativa y que les asigna un elevado potencial en la ingeniería de tejidos hepáticos.