Científicos de la Universidad Federal de Rio de Janeiro han llevado a cabo un estudio de fase I en el que demuestran la viabilidad de la terapia celular en pacientes con glomeruloesclerosis focal y segmentaria, una patología renal que promueve el avance de la insuficiencia de este órgano. La administración ...
Científicos de la Universidad Federal de Rio de Janeiro han llevado a cabo un estudio de fase I en el que demuestran la viabilidad de la terapia celular en pacientes con glomeruloesclerosis focal y segmentaria, una patología renal que promueve el avance de la insuficiencia de este órgano. La administración de células mononucleares derivadas de médula ósea autóloga, a través de la arteria renal de cada riñón, mostró ser segura, sin que se registraran efectos adversos serios a lo largo de los 270 días de monitorización.
Mediante el marcado de las células terapéuticas con un trazador de imagen, los investigadores constataron que éstas se distribuyen por múltiples órganos, especialmente en el riñón y el hígado, tanto a las 2 como a las 24 horas de la infusión. Marcelo Marcos Morales, director del estudio, afirma que aunque la terapia se asoció a un aumento transitorio de los niveles de creatinina sérica, los valores de este biomarcador se redujeron a los 30 días.
El científico prosigue indicando que el tipo de glomeruloesclerosis examinada suele presentarse en forma de síndrome nefrótico, con una prevalencia creciente en todo el mundo. Aunque los inmunosupresores y los inhibidores del sistema renina-angiotensina representan la principal línea de tratamiento, algunos pacientes no responden a estas medicaciones, imponiendo finalmente la necesidad de trasplante. El uso de terapia celular para evitar este desenlace estaría justificado por estudios preclínicos previos, en los que fue observada una disminución de la tasa de progresión de la enfermedad, a lo que se suma la seguridad de la infusión intraarterial reportada en un metanálisis de múltiples ensayos clínicos, concluye Morales.