El epigenoma es un sistema de marcas químicas en el ADN que regula los genes expresados por la célula. La reprogramación de dicho epigenoma inducida por la inflamación podría cambiar la expresión de los genes involucrados en la reproducción celular. Por otra parte, hay evidencia de que la inflamación desempeña ...
El epigenoma es un sistema de marcas químicas en el ADN que regula los genes expresados por la célula. La reprogramación de dicho epigenoma inducida por la inflamación podría cambiar la expresión de los genes involucrados en la reproducción celular. Por otra parte, hay evidencia de que la inflamación desempeña un papel en la producción de adaptaciones metabólicas en diversos objetivos celulares inmunes y no inmunes.
En este contexto, un novedoso estudio realizado por investigadores de la Facultad de Medicina de Baylor, la Universidad de Michigan y otras instituciones colaboradoras en EEUU determina que la inflamación intestinal llega a dejar ´marcas´ a largo plazo en las células madre intestinales. Según exponen en su trabajo, publicado en la revista ´Cell Stem Cell´, los autores se centraron para su investigación en la enfermedad de injerto contra huésped (EICH) gastrointestinal, una de las principales causas de mortalidad tras la realización de un trasplante de médula ósea. Dicha patología se caracteriza por la reacción inflamatoria que provoca en la que las células T inmunes del donante del trasplante de médula ósea atacan las células intestinales del huésped, principalmente las células madre intestinales. "En este estudio, investigamos las consecuencias de la inflamación en las células madre embrionarias en modelos clínicamente relevantes y bien definidos de EICH", explicó el Dr. Pavan Reddy, profesor y director del Centro Oncológico Integral Dan L Duncan en Baylor.
Utilizando modelos celulares y animales, los investigadores descubrieron que la exposición a la inflamación impulsó a las células madre embrionarias a cambiar su metabolismo de maneras que resultaron en la acumulación de succinato, un producto de los procesos celulares, que a su vez reprogramaron el epigenoma. "Las células madre inducidas por la inflamación retienen las cicatrices de la inflamación, que perjudican su capacidad de regeneración y reparación", subrayaron.
Asimismo, "descubrimos que las células madre inmunitarias no habían superado su exposición inicial a la inflamación. A pesar de mitigar la inflamación de la EICH durante 28 días, estas mantuvieron una capacidad regenerativa reducida que condujo a una recuperación deficiente y a un aumento de la mortalidad por desafíos, como la exposición a la radiación no letal, en modelos animales", tal como expuso el Dr. Reddy.
En definitiva, lo que demuestra este estudio es que la inflamación provoca cambios metabólicos que remodelan el epigenoma y dejan su memoria en las células madre inmunitarias. Sin embargo, los autores consideran necesario analizar si se produce una reprogramación similar o distinta en otros tejidos y otros tipos de inflamación, y es que, como indicaron, "nuestro estudio se centró en las células madre in situ Lgr5 +, un tipo de subconjunto de células madre que ciclan activamente en el intestino y, por lo tanto, se limita a ellas". No obstante, agregaron, "se están realizando más investigaciones para diseñar estrategias que ayuden a las células madre inmunitarias a ´olvida´ su encuentro con la inflamación y mejorar su resiliencia contra los ataques inmunológicos".