Una investigación liderada por Quirónsalud con la colaboración del Departamento Médico de Roche Farma en España ha arrojado luz sobre factores predictivos clave para la detección precoz y la intervención en el deterioro cognitivo, lo cual puede contribuir, a su vez, a frenar enfermedades neurodegenerativas como el Alzheimer.

Como subrayó, al respecto, este martes en rueda de prensa, el director general de Roche Farma en España, Patrick Wallach, "esta enfermedad constituye una verdadera prioridad de salud pública". De ahí, ante el reto sanitario que representa este tipo de patologías "el área de Neurociencias es muy importante para nosotros, somos muy persistentes con las enfermedades neurodegenerativas que aún tienen muchas necesidades por cubrir. Es por ello que seguimos invirtiendo y dedicando recursos a la investigación", según indicó Wallach.

Además, como agregó, "más allá del desarrollo de terapias innovadoras también colaboramos en proyectos destinados a la prevención, al abordaje y a la calidad de vida de estos pacientes y sus familias".

En línea con lo expuesto por el director general de Roche Farma en España, el Dr. Jorge Mauriño, responsable del área de Neurociencias de esta compañía, corroboró, durante su intervención, el compromiso de Roche Farma con las enfermedades neurodegenerativas, de entre las que destacó Alzheimer, Parkinson y esclerosis múltiple. El Dr. Mauriño insistió, al respecto, en la necesidad de la detección temprana, así como la importancia del proyecto en el que se ha colaborado con Quirónsalud para identificar factores predictores de la enfermedad de Alzheimer. 

Asociado a esta patología, se detuvo en un concepto que se maneja cada vez más como es "el alzheimer prodrómico, una etapa inicial en la que la persona comienza a manifestar signos de deterioro cognitivo leve", aunque como lamentó, "desafortunadamente, no suele detectarse en las consultas del sistema asistencial habitual, perdiéndose un tiempo esencial".

Resultados relevantes

En la rueda de prensa organizada conjuntamente por Roche Farma en España y Quironsalud, a la que también se sumó la directora gerente territorial de Quirónsalud Madrid, Dra. Lucía Alonso, el jefe del Departamento de Neurología de los hospitales universitario Quirón Madrid, Ruber Juan Bravo y del centro médico-quirúrgico Olympia, Dr. Rafael Arroyo, expuso los resultados preliminares más relevantes de la investigación liderada por Quirónsalud con la colaboración del Departamento Médico de Roche Farma en España.

De las principales conclusiones del estudio cabe destacar que factores como la edad, la apatía, la ansiedad y el nivel educativo son clave para predecir la progresión del deterioro cognitivo, recomendándose tenerlos en cuenta de cara a la detección precoz y la intervención temprana en enfermedades como el Alzheimer, que, según el Dr. Arroyo, "constituye actualmente una pandemia. Solo en España, se calcula que padecen esta patología unas 800.000 personas".

Sin embargo, consideró que "los tratamientos que tenemos a estos momentos no son suficientemente eficaces, además, tratamos tarde y con fármacos que habría que mejorarlos".

No obstante, se mostró convencido del cambio que va a experimentar el abordaje de esta enfermedad en los próximos años. A ello puede contribuir, sin duda, la información que se desprende de estudios como el presentado por el Dr. Arroyo. Para este trabajo, se recopiló información, desde el punto de vista neuropsicológico y epidemiológico, procedente de hasta 3.000 personas incluidas en una base de datos puesta en marcha por Quirónsalud en 2007 hasta 2022 sobre las consultas realizadas por problemas cognitivos, durante dicho período, en los servicios de neurología de varios centros de este Grupo hospitalario en Madrid.

La intención del equipo del Dr. Arroyo, según avanzó, pasa por seguir trabajando en ampliar esta base de datos con la introducción, además, de otros biomarcadores. "Con ello, de aquí a cinco años con estos biomarcadores, análisis de sangre y marcadores en imagen podríamos predecir a cierta edad no superior a 60 años qué personas al cabo de 10-20 años podrían estar en riesgo de desarrollar Alzheimer".