Atribuyen a la sal común un papel en la defensa antitumoral
La potenciación de la activación de los linfocitos T CD8+ por el cloruro sódico podría tener implicaciones en la producción de terapias celulares CAR-T más eficaces.
Científicos de múltiples centros alemanes y austríacos han descubierto que el cloruro sódico (NaCl) contribuye a la activación de los linfocitos T CD8+ humanos y potencia sus funciones efectoras. En cultivos de estas células inmunitarias la adición de NaCl incrementó la señalización iniciada por el receptor del antígeno, modificando además ...
Científicos de múltiples centros alemanes y austríacos han descubierto que el cloruro sódico (NaCl) contribuye a la activación de los linfocitos T CD8+ humanos y potencia sus funciones efectoras. En cultivos de estas células inmunitarias la adición de NaCl incrementó la señalización iniciada por el receptor del antígeno, modificando además la expresión de casi 4000 genes, incluyendo algunos que codifican proteínas de transporte de nutrientes, tales como azúcares y aminoácidos.
Hannes Stockinger, investigador de la Universidad Médica del Viena y coautor del estudio, afirma que otros genes estimulados por el NaCl tienen un papel central en el metabolismo y/o están asociados a la viabilidad celular, al desarrollo de memoria inmunológica y a la producción de linfotoxina alfa, esencial en la citotoxicidad frente al tumor. Los hallazgos han tenido lugar tras observarse que la concentración de iones de sodio en muestras de resección de tejido tumoral de mama es significativamente mayor que en la región peritumoral. Notablemente, los linfocitos T CD8+ infiltrados en el tumor exhibieron un patrón transcriptómico distinto del de los peritumorales.
El potencial clínico de los hallazgos ha sido puesto de manifiesto por el mismo equipo científico, en experimentos con linfocitos portadores de receptores quiméricos (CAR-T) específicos de un antígeno del cáncer de páncreas. La pre-estimulación de las células terapéuticas con concentraciones elevadas de NaCl incrementó su capacidad citotóxica, en comparación con concentraciones bajas, asegura Stockinger. Resultados similares fueron obtenidos con la transferencia adoptiva de linfocitos T CD8+ en un modelo in vivo del mismo tipo de cáncer, concluye el investigador.
