Madrid ha acogido la presentación en España de la décima edición del informe de salud STADA Health Report, una encuesta representativa de alrededor de 46.000 personas de 23 países europeos, entre ellos España. En el evento han participado Dra. Juana Sánchez, médico de la Sociedad Española de Medicina General; Tamara ...
Madrid ha acogido la presentación en España de la décima edición del informe de salud STADA Health Report, una encuesta representativa de alrededor de 46.000 personas de 23 países europeos, entre ellos España. En el evento han participado Dra. Juana Sánchez, médico de la Sociedad Española de Medicina General; Tamara Peiró, responsable del Área Asistencial del Consejo General de Colegios Oficiales de Farmacéuticos; Dra. Ana López Trenco, vocal de salud mental del Foro Español de Pacientes; y Mar Fábregas, directora general de STADA.
Si bien el 62% de los españoles describe su salud mental como buena, una cifra 13 puntos superior que en 2022 (49%), los profesionales y pacientes apuntan a la necesidad de establecer una mayor colaboración interdisciplinar para abordar los retos que plantea la salud mental. No basta con un enfoque sanitario tradicional; es necesario integrar diferentes disciplinas y sectores, desde psicólogos hasta trabajadores sociales, educadores, farmacia y profesionales médicos.
Pese a que los resultados del estudio muestran una evolución positiva de la salud mental en España en comparación con países de nuestro entorno, todavía queda camino por recorrer, especialmente en la prevención y la detección precoz. En palabras de Mar Fábregas, directora general de STADA en España, "una mayor colaboración interdisciplinar aporta beneficios significativos en términos de una detección más temprana y un tratamiento más integral de los problemas de salud mental".
Muchos se sienten solos, especialmente los jóvenes
En un mundo hiperconectado, son muchas las personas que afirman sentirse solas en España: el 48% de los españoles afirman experimentar sentimientos de soledad, lo cual se agrava en la población más joven, con una cifra del 65% entre los menores de 35 años. Entre las razones que explican este sentimiento de soledad, destacan la falta de tiempo para un mayor contacto social, el exceso de trabajo, la pérdida de seres queridos o el exceso de tiempo en las redes sociales o videojuegos.
Sin duda, son resultados que invitan a reflexionar acerca de los cambios en el tipo de socialización actual. Algunas posibles estrategias de prevención deberían centrarse en crear más espacios de apoyo e interacción real, fomentar el bienestar emocional y abordar las causas estructurales que están detrás de esta soledad, como la falta de tiempo o las dificultades económicas. Para la Dra. Ana López Trenco, vocal de salud mental del Foro Español de Pacientes, es una prioridad "trabajar una buena planificación estratégica. Es esencial proporcionar información a los pacientes y recomendarles que se unan a asociaciones donde puedan recibir formación y participar activamente en su proceso de recuperación, fomentando programas de psico y fármaco educación. La clave no está en abordar el problema cuando ya ha estallado, sino en prevenir y actuar con anticipación. Esto evitaría, entre otros problemas, que se psiquiatricen problemas de la vida diaria, que colapsan el sistema".
Los retos del envejecimiento
Además, en lo que refiere a envejecimiento, los resultados del STADA Health Report destacan también la preocupación de los españoles por el envejecimiento y sus consecuencias. En este sentido, los españoles se sitúan entre los europeos más preocupados por convertirse en personas dependientes (73%) cuando envejezcan, solo superados por los portugueses (74%). El declive físico propio de la edad (74%) y las enfermedades neurodegenerativas como el Alzheimer y el Parkinson (69%) son otras de las principales preocupaciones asociadas al envejecimiento en España.
En este sentido, la colaboración entre distintos actores del sistema sanitario es fundamental, en tanto que los colectivos médico, enfermería y farmacéutico, así como otros profesionales, colaboren para proporcionar un enfoque integral centrada en la detección precoz y el cuidado del paciente, sin olvidar el entorno familiar y de los cuidadores. Tamara Peiró, responsable del Área Asistencial del Consejo General de Colegios Oficiales de Farmacéuticos, explica que "alrededor de un 35% de la población está diagnosticada con alguna patología y aumenta si lo asociamos además al envejecimiento, que ha aumentado un 137% en el último año en nuestro país. Desde la farmacia vemos cada día situaciones en las que los pacientes necesitan cambios de tratamiento, o nos encontramos faltas de adherencia lo que conlleva la necesidad de poder comunicarlo al instante. Necesitamos urgentemente un sistema de intercomunicación que sea general, nacional, y que esté protocolizado. Tendríamos que apostar más por esa comunicación para que no haya medidas aisladas que luego no se puedan poner en práctica a nivel global".
No obstante, tal y como ya mostraban las conclusiones del STADA Health Report 2023, sigue existiendo una falta de atención significativa en la prevención. En 2024, tan solo 4 de cada 10 españoles afirman realizar las revisiones periódicas de salud. Es un resultado que muestra una amplia oportunidad de mejora para el sistema y que puede aportar resultados en salud predecibles. Desde las políticas de salud, es esencial fomentar aún más la prevención, promoviendo hábitos de vida saludables, programas de envejecimiento activo y de detección y cribaje precoz de posibles enfermedades.
Este tipo de iniciativas no solo mejoran la calidad de vida de las personas, sino que también reducen la carga sobre el sistema sanitario a largo plazo. En este sentido, la Dra. Juana Sánchez, médico de la Sociedad Española de Medicina General, apuesta por "una mayor comunicación bidireccional entre la farmacia comunitaria y la atención primaria, especialmente cuando se detecten problemas de adherencia a los tratamientos o la necesidad de ajustes terapéuticos. No puede haber medidas aisladas que no se apliquen de manera global. Es crucial que todas las actuaciones estén protocolizadas a nivel nacional. Si fomentamos la prevención y mejoramos la coordinación entre los diferentes actores del sistema sanitario, podremos reducir los costos a largo plazo y mejorar significativamente la salud de la población".