Un nuevo informe de ´The Lancet´, presentado durante la Cumbre Mundial de Salud, celebrada, recientemente, en Berlín, identifica 15 amenazas clave para la salud que provocan muertes prematuras en todo el mundo, incluyendo el tabaquismo como principal causante. El informe Global Health 2050 (GH2050), elaborado por la Comisión de Inversión en Salud de The ...
Un nuevo informe de ´The Lancet´, presentado durante la Cumbre Mundial de Salud, celebrada, recientemente, en Berlín, identifica 15 amenazas clave para la salud que provocan muertes prematuras en todo el mundo, incluyendo el tabaquismo como principal causante.
El informe Global Health 2050 (GH2050), elaborado por la Comisión de Inversión en Salud de The Lancet (CIH), ofrece una hoja de ruta para que los países de todos los niveles de ingresos logren las máximas mejoras en el bienestar humano para mediados de siglo
El objetivo "50 para el 50", una reducción del 50% en la probabilidad de muerte prematura, para 2050, (muerte antes de los 70 años), se puede lograr centrándose en estas 15 condiciones prioritarias, ocho relacionadas con enfermedades infecciosas y salud materna y siete relacionadas con enfermedades no transmisibles y lesiones, tal como se desprende del documento.
El informe, según sus autores, llega en un momento en el que la salud mundial se enfrenta a muchos obstáculos: tensiones geopolíticas, conflictos actuales y nuevos, un cambio climático cada vez más manifiesto, un progreso más lento hacia la cobertura sanitaria universal, costos crecientes de la atención médica y el riesgo siempre presente de pandemias.
En el GH2050 se recomienda la financiación pública de medicamentos esenciales destinados a las 15 amenazas referidas, en forma de enfermedad, que provocan mortalidad prematura. Asimismo, propone movilizar financiación internacional y esfuerzos conjuntos de adquisición, similares a las estrategias utilizadas por GAVI, PEPFAR y el Fondo Mundial, para reducir los costos tanto para los pacientes como para los gobiernos.
Conjunto básico de intervenciones
El GH2050 reitera las recomendaciones iniciales de los CIH de que los gobiernos nacionales mantengan su enfoque en la financiación pública de un conjunto básico de intervenciones y estén disponibles para todos, comenzando con las intervenciones de mayor relación calidad-precio dirigidas a las 15 condiciones prioritarias.
Agrupa estas intervenciones en 19 módulos, entre ellos, uno de inmunización infantil y otro sobre prevención y tratamientos de bajo costo y ampliamente disponibles para las enfermedades cardiovasculares. Desde el punto de vista de los autores, la adopción de este enfoque centrado también debería abordar las principales morbilidades, como las enfermedades psiquiátricas, que aún no están cubiertas por las intervenciones para reducir la mortalidad.
También propone una nueva herramienta, el análisis coste-efectividad modular, para ayudar a los planificadores a diseñar paquetes de beneficios de salud. Según se propone, la herramienta se puede utilizar en un proceso de dos pasos: análisis de coste-efectividad técnica para evaluar la mejor manera de alcanzar los objetivos específicos del módulo (por ejemplo, reducciones en la mortalidad infantil o la mortalidad cardiovascular) y evaluación política de las compensaciones al invertir en la expansión de la cobertura del módulo.
"Se pueden lograr reducciones drásticas de la mortalidad y la morbilidad centrándose en 15 enfermedades prioritarias", señaló la Dra. Angela Chang, de la Universidad del Sur de Dinamarca y autora principal del informe. "Redoblar las inversiones en salud del pasado, concentrar los recursos en un conjunto reducido de enfermedades, aumentar la financiación y desarrollar nuevas tecnologías puede seguir teniendo un impacto enorme a pesar de los obstáculos".
Nuevo riesgo de pandemias
La investigación de antecedentes realizada para el informe GH2050 apunta, entre otros aspectos, a un riesgo de mortalidad alto por pandemias. El GH2050 estima, al respecto, que existe una probabilidad superior al 20% en los próximos 10 años de una pandemia que mate al menos a 25 millones de personas, una magnitud similar a la de la pandemia de COVID-19. Expresado este riesgo de otra manera, en promedio, habría 2,5 millones de muertes relacionadas con pandemias por año (sin muertes en la mayoría de los años).
De estas muertes, es posible que un 1,6 millones fueran por una pandemia de gripe y 0,9 millones por una pandemia de coronavirus. El promedio de 2,5 millones de muertes por año representa, aproximadamente, la misma cantidad de fallecimientos que se producen anualmente por VIH/SIDA, tuberculosis y malaria conjuntamente y mucho mayor que la cantidad de muertes anuales por cambio climático proyectadas incluso en escenarios muy pesimistas en las próximas décadas.
Se considera que en la próxima pandemia, los principios básicos de salud pública ayudarán a evitar la mortalidad mientras se espera el desarrollo y la distribución de vacunas. Estos principios básicos incluyen una respuesta rápida, el aislamiento de las personas infectadas, la cuarentena de las personas potencialmente expuestas a la infección, y el apoyo social y financiero a las personas que se aíslan o se encuentran en cuarentena.