La conferencia inaugural del 65º Congreso de la Sociedad Española de Endocrinología y Nutrición (SEEN), este miércoles, la impartió Emanuele Bosi (Milan, Italy), sobre la detección de diabetes tipo 1. ¿Por qué vale la pena (o no) prestarle atención? Los moderadores fueron Ignacio Bernabéu (Santiago de Compostela), María Ballesteros (León) y ...
La conferencia inaugural del 65º Congreso de la Sociedad Española de Endocrinología y Nutrición (SEEN), este miércoles, la impartió Emanuele Bosi (Milan, Italy), sobre la detección de diabetes tipo 1. ¿Por qué vale la pena (o no) prestarle atención?
Los moderadores fueron Ignacio Bernabéu (Santiago de Compostela), María Ballesteros (León) y Edelmiro Menéndez (Oviedo). Explicaron que es diabetólogo ilustre y que está muy centrado en la inmunidad y la diabetes tipo 1. Trabaja en el Hospital IRCCS San Raffaele de Milán y profesor de Medicina Interna en la Universidad Vita-Salute San Raffaele. Bosi aseveró que "la diabetes tipo 1 es una emergencia de Salud pública". Aclaró que es una enfermedad crónica que afecta a personas de cualquier edad (niños, adolescentes, jóvenes, adultos e incluso personas mayores) y que en la actualidad no tiene cura. Expuso que requiere terapia con insulina de por vida y se asocia con una calidad de vida reducida, complicaciones graves a largo plazo, una esperanza de vida más corta y costos sustanciales para las personas y los sistemas de atención médica. La etiología sigue siendo desconocida, la patogénesis es autoinmune, pero hay ejemplos iniciales de terapias efectivas para modificar la enfermedad. Advirtió de que "la prevalencia y la incidencia han aumentado y continúan aumentando con el tiempo".
Esperó que, al final de su conferencia, la mayoría del auditorio esté interesada en este tema, que es la detección de la diabetes tipo 1. Sostuvo que la prevención de esta pandemia funciona. "Ésta no es una opinión personal. Creo que vale la pena intentar lograrlo. La prevención de la pandemia se debe a que la pandemia es una emergencia de Salud pública. El problema es que puede afectar a la gente. Y no se trata sólo de enfermedades de niños y adultos, sino que ahora sabemos que cualquier persona, a cualquier edad, puede verse afectada", insistió. Consideró que es necesario que la calidad de vida en cualquier parte del mundo no se reduzca por esta enfermedad. Recordó que, a pesar de todos los logros y mejoras asociados con la salud a largo plazo, la esperanza de vida sigue siendo mayor en comparación con las personas que no tienen esa enfermedad.
Además, está el "altísimo coste" de esta enfermedad. Sabemos que no se trata de enfermedades inmunomediadas. Y desde entonces, también tuvimos la primera demostración de que no lo somos. "Otra razón por la que hay una urgencia en cuanto al problema es que la incidencia y la enfermedad siguen aumentando", declaró. Se ha multiplicado por cuatro o cinco en los últimos años.
Una razón relacionada con la evidencia es que la aparición de los anticuerpos ocurre muy temprano en la vida. Hay algunas características, pero la primera es a la edad de dos y tres años. "Esto fue inesperado. Entonces, la maquinaria de inmunidad del huésped comienza muy temprano en la vida", relató.
"Desde un punto de vista ético y científico, el sistema funciona. Y ésa es la buena noticia. Así que, para responder a la pregunta, me invitasteis aquí, a este maravilloso lugar, y me pedisteis si es fácil o no. Sí, es porque el objetivo es factible y aceptable. Esto ya se demostrado en otros países, pero también creo que es igual o incluso mejor", concluyó. Admitió que no es fácil de organizar, pero es factible y su opinión es que hacerlo será recompensado.