Ensayos clínicos muestran que la semaglutida, un análogo anogista de GLP-1, reduce la ingesta calórica, aumenta la sensación de saciedad, plenitud, reduce la sensación de hambre, y la frecuencia y la intensidad del ansia de comer. Javier Salvador, profesor emérito de Endocrinología de la Universidad de Navarra, ha sido moderador de la jornada de actualización científica Da el paso a una nueva realidad, en la que se explicó el desarrollo científico de Wegovy, semaglutida inyectable 2,4 mg de administración semanal, que reduce un 20 % el riesgo de eventos cardiovasculares mayores en personas con sobrepeso u obesidad, sin diabetes y con enfermedad cardiovascular establecida.

En entrevista, nos cita los estudios STEP-10 y SELECT, de los que también se está hablando en el 65º Congreso de la Sociedad Española de Endocrinología y Nutrición (SEEN), a la hora de abordar la lucha contra la obesidad. Explica que la gente se preocupa por la diabetes, pero que, en la gran mayoría de las veces, antes de la diabetes tipo 2, existe el estado de prediabetes, "que es una situación intermedia entre la normalidad del metabolismo hidrocarbonado y la diabetes". Señala que no se le suele dar tanta importancia y que muchas personas piensan que no pasa nada porque no es diabetes. "Pues sí, qué pasa, porque la prediabetes se asocia a un riesgo cardiovascular y mortalidad aumentada", subraya. Sostiene, en ese sentido, que tratar la prediabetes es fundamental "con objeto de recuperar la tolerancia hidrocarbonada normal y evitar la transición a diabetes tipo 2". De lo contrario, el riesgo cardiovascular va incrementándose, lo que sucede de forma especial cuando se desarrolla diabetes tipo 2.

Considera que advertir sobre la importancia de la prediabetes es crucial. "La prediabetes es una situación clínica muy relevante, porque se asocia a un riesgo cardiovascular claro y a riesgo de complicaciones en general", insiste. Apunta que "el tratamiento con wegovy tiene un efecto favorable en esta dirección". Expone que reduce el exceso de la masa grasa y su disfunción, que "son los factores que generan inflamación y resistencia a la insulina". Añade que éstos son los mayores promotores del desarrollo tanto de prediabetes como de diabetes. "Es decir, es un fármaco que actúa de forma potente, estimulando los receptores de GLP-1, que es una molécula que todos tenemos en el organismo y que se incrementa en respuesta a la ingesta de alimentos. Favorece la liberación de insulina y su efecto a nivel tisular. Wegovy no sólo hace perder peso, sino que además mejora la función de las células beta pancreáticas merced a su efecto incretínico", informa. Describe que amos efectos hacen que la prediabetes pueda regresar a la normoglucemia, a una situación normal desde el punto de vista de la tolerancia hidrocarbonada. 

Salvador confirma, en el estudio STEP-10, a personas con prediabetes se les administró semaglutida 2,4 miligramos semanales o placebo durante un año. Tras ese tiempo, se evaló el metabolismo hidrocarbonado. "Y resulta que en el 81 % de las personas que tenían prediabetes ésta desaparece con el tratamiento de semaglutida 2,4 miligramos", comunica. Si bien, el estudio prosigue después de retirar la semaglutida, y cuando ya se pasa desde la semana 52 a la semana 80, es decir, 28 semanas después de haber retirado las semaglutida, la tasa de la reversión de normoglucemia baja al 44 %. Por tanto, al retirar el fármaco, se reducen los beneficios obtenidos, en este caso para revertir la prediabetes. 

Comenta que el estudio SELECT está hecho en personas con más de 45 años sin diabetes, pero con enfermedad cardiovascular establecida, que han sufrido un infarto de miocardio, un accidente o presentan enfermedad arterial perfiérica . Una de las conclusiones es que "el tratamiento con semaglutida durante un período de 40 meses consigue reducir frente a placebo la aparición de eventos cardiovasculares mayores duros (MACE), evaluado mediante un objetivo combinado que incluye infarto de miocardio no mortal, accidente cerebrovascular no mortal y mortalidad cardiovascular". "Ese parámetro global medido en las personas que sufren alguno de estos elementos a lo largo de esos cuatro años de evolución se reducen un 20 %", puntualiza. Destaca que hasta ahora no ha habido ningún tratamiento farmacológico dirigido a la obesidad que obtenga un resultado así en la reducción del riesgo cardiovascular. Avisa de que no es un efecto preventivo, porque son personas que ya tienen enfermedad cardiovascular establecida.

De la jornada de actualización científica Da el paso a una nueva realidad, opina que fue una reunión muy interesante por dos razones. "Tuvo una primera parte en la que se habló de lo que es el desarrollo del fármaco, de los efectos y de los estudios más recientes. Se avanzó el diseño de un estudio de osteoartritis. Se dieron detalles del estudio SELECT, de la disminución de eventos cardiovasculares en pacientes con enfermedad cardiovascular establecida y sin diabetes tratados con semaglutida durante 40 meses. Se abordó la fisiopatología, de las causas y de las relaciones que hay entre obesidad e insuficiencia cardíaca", cuenta. El estudio SELECT, que incluye a 17.000 personas, un 24 % con insuficiencia cardiaca, demuestra igualmente que "tengas o no tengas insuficiencia cardíaca, los efectos de la semaglutida, de wegovy, sobre los eventos cardiovasculares duros se mantienen igualmente significativos". Por ende, "el hecho de tener o no insuficiencia cardíaca no atenúa los efectos protectores de la progresión de la patología cardiovascular llevados a cabo por wegovy".

En la segunda parte de la reunión, hubo una sesión de debate, que fue multidisciplinar, con endocrinólogos, médicos de Atención Primaria, internistas, ginecólogos, cardiólogos y nefrólogos. Cada uno estuvo dialogando acerca de lo que la obesidad representaba para su especialidad, los problemas que veían relacionados con la obesidad y de las posibilidades que ofrece wegovy para las diversas patologías específicas que atienden estos especialistas.