En Galicia, el principal reto en el manejo conjunto de las espondiloartritis (EspA) y la enfermedad inflamatoria intestinal (EII) es la creación de consultas multidisciplinares que integren las especialidades de digestivo y reumatología. Tal y como se ha destacado en un reciente encuentro, en el caso de esta comunidad autónoma, ...
En Galicia, el principal reto en el manejo conjunto de las espondiloartritis (EspA) y la enfermedad inflamatoria intestinal (EII) es la creación de consultas multidisciplinares que integren las especialidades de digestivo y reumatología. Tal y como se ha destacado en un reciente encuentro, en el caso de esta comunidad autónoma, el 90% de los servicios de Digestivo de la comunidad han sido acreditados como unidades de EII por GETECCU (Grupo Español de Trabajo en Enfermedad de Crohn y Colitis Ulcerosa), siendo necesario que "tengan al menos un reumatólogo de referencia, que puede hacer visita conjunta y que podamos hacer sesiones, es decir, que esté integrado en la unidad", afirman de manera conjunta el Dr. Manuel Barreiro del servicio de Gastroenterología del Hospital Clínico Universitario de Santiago y la Dra. Eva Pérez Pampín, del servicio de Reumatología del Hospital Clínico Universitario de Santiago.
El objetivo de este encuentro organizado por la compañía biofarmacéutica AbbVie es fomentar las sinergias entre las especialidades de reumatología y gastroenterología situando el foco en la importancia del abordaje multidisciplinar de la EII y las EspAs, así como analizar los retos de la región en el manejo conjunto de ambas patologías cuando coexisten en un mismo individuo.
"Este encuentro pretende reforzar este modelo de atención y fortalecer la relación entre nuestras especialidades", ha destacado la Dra. Eva Pérez Pampín durante la reunión. Una percepción compartida por el Dr. Manuel Barreiro quién añade que tanto digestivo, especialmente aquellos centrados en el manejo de la EII, como reumatología "tenemos mucho en común: compartimos fármacos, compartimos enfermedades complejas, pero siempre está bien seguir fortaleciendo esta relación y yo creo que son los encuentros que deben de promocionarse más, porque realmente aprendemos mucho unos de otros".
Co-ocurrencia EspA y EII ¿a qué se debe esta relación?
Tanto las EspA como la EII se engloban dentro de las enfermedades inflamatorias inmunomediadas (IMID de las siglas en inglés, Immune-Mediated Inflammatory Diseases) al ser patologías inflamatorias crónicas originadas por alteraciones del sistema inmunológico.
"La enfermedad inflamatoria intestinal y las espondiloartropatías son enfermedades inmunomediadas que afectan en general a gente joven. No se sabe cuál es la causa y lo que está claro es que eso afecta mucho en el día a día de nuestros pacientes. Por lo tanto, una relación entre dos especialidades, cosa que hasta hace poco se trataban de manera independiente en dos servicios, es muy importante", afirma el Dr. Barreiro. Así mismo, en palabras de la Dra. Pérez, "tanto la EspA como la EII son enfermedades inmunomediadas (IMID). El término IMID hace referencia a enfermedades inflamatorias crónicas originadas por alteraciones del sistema inmunológico. Incluyen enfermedades tan heterogéneas como la psoriasis, la colitis ulcerosa o la enfermedad de Crohn, entre muchas otras, pero todas tienen en común generar una importante repercusión en el estado general de las personas afectadas".
La "Co-ocurrencia", un término muy vinculado a las enfermedades inflamatorias inmunomediadas, se utiliza para referirse a la presencia de varias IMID en un mismo individuo. De hecho, se estima que 1 de cada 10 pacientes es diagnosticado de dos o más IMID que coexisten, lo que complica el manejo de estas enfermedades y provoca un alto grado de morbilidad y discapacidad. En el caso de los pacientes con EII se estima que el 30% de ellos acabará desarrollando EspA. Por su parte, en aquellos pacientes con EspA que conviven también con la EII esta cifra se sitúa entre el 5% al 10%.
"El abordaje multidisciplinar es clave cuando ocurren estas dos enfermedades, porque primero vamos a utilizar el mejor fármaco para las dos situaciones. Vamos a optimizar las pruebas necesarias para las dos, incluso vamos a producir un ahorro porque probablemente evitemos que acuda al hospital de más, al verlo conjuntamente", señala el Dr. Barreiro.
En este punto, tal y como ha resaltado la Dra. Pérez, durante el encuentro se ha situado el foco en la innovación. "Hasta hace pocos años se disponía de un arsenal terapéutico limitado para los pacientes con ESpA/EII. La llegada de nuevos fármacos ha cambiado el manejo de estas enfermedades, ofreciéndonos nuevas oportunidades para la atención de la EII. Por otra parte, el trabajo conjunto de estos años nos ha permitido el acceso temprano a estos nuevos fármacos, con diferentes dosificaciones en función del cuadro clínico predominante y que nos permita abarcar todo el espectro de la enfermedad".
MEMEs y MEIs
Las espondiloartritis son una familia variada de enfermedades inflamatorias crónicas diferentes, entre las que se incluyen principalmente la espondiloartritis axial y la artritis psoriásica, entre otras. Las espondiloartritis pueden afectar a articulaciones periféricas (como rodillas, codos, muñecas o pies) o a las entesis (las zonas donde se unen los ligamentos y tendones a los huesos), pero también a órganos diferentes al sistema locomotor, hecho que se conoce con el nombre de manifestaciones extramusculoesqueléticas (MEMEs). La presencia de MEMEs está asociada a una alta actividad de la enfermedad y un mayor deterioro funcional y se estima que el 44% de los pacientes con espondiloartritis axial desarrolla al menos una MEME a lo largo de la enfermedad, siendo las más comunes la uveítis, la enfermedad inflamatoria intestinal y la psoriasis.
"Las manifestaciones extramusculoesqueléticas (MEMEs) son aquellas manifestaciones de la EspA que afectan a órganos diferentes del aparato locomotor. Las más habituales son la enfermedad inflamatoria intestinal (EII) y la uveítis anterior aguda. Ambas se asocian habitualmente a una mayor actividad de la enfermedad. En torno al 40% de los pacientes con EspA desarrolla al menos una MEME a lo largo de la enfermedad", explica la Dra.
Por su parte, la EII es un grupo de enfermedades caracterizadas por inflamación crónica del tubo gastrointestinal entre las que se incluye la enfermedad de Crohn (EC) y la colitis ulcerosa (CU). Diarrea, estreñimiento, dolor o sangrado al defecar, son algunos de los signos que presentan estas patologías, pudiéndose presentar también manifestaciones y complicaciones extraintestinales (MEIs), como las espondiloartritis presentes en el 30% de los pacientes con EII.
En el caso de las MEIs, tal y como sostiene el Dr. Barreiro, "dentro de ellas están las espondiloartropatías tanto axiales como como periféricas, pero también están las dermatológicas. Dentro de las dermatológicas destacan el eritema nodoso y el pioderma gangrenoso y también están las manifestaciones oculares como las uveítis. Otras más específicas como la colangitis esclerosante primaria así como fenómenos tromboembólicos y muchas más. Hasta un 35 %, los pacientes con enfermedad de Crohn o colitis ulcerosa pueden tener este tipo de manifestaciones".
Tanto la presencia de MEMEs como de MEIs agudiza aún más la carga de la enfermedad e influye en la calidad de vida del paciente, un hecho que enfatiza la importancia del manejo multidisciplinar pues facilita el diagnóstico precoz, optimiza el manejo de la EspA y la EII, así como de las comorbilidades asociadas y, además, permite optimizar el uso apropiado de los tratamientos.
"La presencia de una MEME asociada condiciona una disminución de la capacidad laboral y social del paciente y un deterioro en su calidad de vida, por lo que además de la evaluación actual de la actividad de la enfermedad se deben evaluar las manifestaciones extraarticulares asociadas y su impacto a través de cuestionarios de calidad de vida reportados por el paciente, con el objetivo de asegurar el bienestar de los pacientes en todas las esferas", añade la Dra. Pérez. Por su parte en el caso de la EII, "las manifestaciones extraintestinales afectan mucho la calidad de vida de nuestros pacientes. En un estudio de nuestro servicio que ya presentamos al congreso europeo (ECCO) hace unos años vimos como la presencia de manifestaciones extraintestinales, deterioran más la calidad de vida que, por ejemplo circunstancias, como tener una enfermedad perianal, porque no solo afecta desde el punto de vista físico sino también psicológico y afectan mucho en la relaciones interpersonales y vida social", puntualiza el Dr. Barreiro.