Los pacientes con Enfermedad Pulmonar Obstructiva Crónica (EPOC), que afecta a unos 600 millones de personas en todo el mundo, experimentan dificultad para respirar, tos persistente con moco, sibilancias e infecciones respiratorias frecuentes, lo que puede dificultar las actividades cotidianas. Además, dichos pacientes tienen un mayor riesgo de sufrir infecciones respiratorias y ...
Los pacientes con Enfermedad Pulmonar Obstructiva Crónica (EPOC), que afecta a unos 600 millones de personas en todo el mundo, experimentan dificultad para respirar, tos persistente con moco, sibilancias e infecciones respiratorias frecuentes, lo que puede dificultar las actividades cotidianas. Además, dichos pacientes tienen un mayor riesgo de sufrir infecciones respiratorias y neumonía.
Dar con la clave para mejorar la calidad de vida de estos pacientes ha sido el objetivo de unnuevo estudio de la Universidad de Copenhague y el Hospital Bispebjerg, cuyos resultados sugieren que una forma de vitamina B3 puede aportar beneficios a los afectados.
"En el estudio, demostramos que el ribósido de nicotinamida, también conocido como vitamina B3, puede reducir la inflamación pulmonar en pacientes con EPOC", según el profesor Morten Scheibye-Knudsen, del Centro para el Envejecimiento Saludable del Departamento de Medicina Celular y Molecular de la Universidad de Copenhague (Austria), y coautor del trabajo publicado en la revista ´Nature age´.
En el estudio doble ciego, aleatorizado y controlado con placebo participaron 40 pacientes con EPOC y 20 sujetos de control sanos. Los pacientes recibieron un placebo o vitamina B3 en dosis de dos gramos al día.
Los resultados mostraron una reducción significativa del marcador de inflamación (interleucina 8 o IL 8) en los pacientes tratados con vitamina B3. Después de seis semanas, los investigadores observaron una reducción de los niveles de IL 8 del 53 por ciento, y este efecto aumentó en un 63 por ciento después de otras 12 semanas.
Los investigadores también descubrieron que los pacientes con EPOC tienen niveles más bajos de una molécula denominada NAD en la sangre, lo que se asocia con un envejecimiento acelerado según los niveles de metilación del ADN. El tratamiento con vitamina B3 resultó en niveles más altos de NAD y mostró signos de retraso del envejecimiento celular.
"Aunque los resultados son prometedores, necesitamos realizar más estudios en poblaciones más grandes para confirmar nuestros hallazgos y determinar los efectos a largo plazo del ribósido de nicotinamida en el tratamiento de la EPOC. Solo mediante una investigación exhaustiva podremos ofrecer el mejor y más eficaz tratamiento a las personas que padecen esta difícil enfermedad", concluyó Morten Scheibye-Knudsen.