Prosiguen los ecos de la Spain Healthcare Innovation Summit 2024 que también dedicó su espacio a la gestión de la información sanitaria de los pacientes con objeto de conocer los hitos alcanzados en la materia junto a los peligros que pueden representar los fallos de seguridad, sin perder de vista la proyección de esta transformación a medio y largo plazo.

Fabrizio Checchia

En esta ocasión, correspondió a Fabrizio Checchia, consultor farmacéutico de acceso al mercado y asuntos de gobierno corporativo, moderar la sesión sobre la historia clínica electrónica abierta con el objetivo de mejorar los resultados centrados en el paciente. Desde testimonios ofrecidos, por ejemplo, desde comunidades autónomas de territorio reducido pero con experiencias robustas en digitalización. Y desde la premisa de que el análisis de los datos no se puede delegar en la inteligencia artificial aunque esta sí suponga una ayuda. Para prestar también atención a la rentabilidad de estos procesos y los costes de las migraciones. Sin olvidar tampoco la capacitación del personal asistencial para aportar la mentalidad que permita las implementaciones sin resistencias a los cambios. Además de tener presente la bidireccionalidad que resulta tan importante para el acceso y que debe estar incluida también en la historia clínica electrónica. Aunque en España se da una clara disparidad territorial que no facilita la libertad de elección de los productos por parte de los médicos, como señaló este experto.

Rocío Montalban

En opinión de la subdirectora general de salud digital de la consejería de salud de Cantabria, Rocío Montalban, es importante hablar de dicha bidireccionalidad para el paciente, en un momento en el que la información está disponible pero no se utiliza. De manera que es objetivo de su comunidad autónoma que la información sanitaria de calidad pueda ser de ida y vuelta, pero sin duplicidades. En un proceso de digitalización personal de los datos que ya alcanza al 30% de la población cántabra. Aspecto que permite llevar a los pacientes sus imágenes médicas a distintos prestadores de salud en busca de segundas opiniones, por ejemplo. A lo que añadió que, frente a 900.000 búsquedas de información hechas por los pacientes, los profesionales consultan poco.

Ángel Blanco

Seguidamente Ángel Blanco, director de organización, procesos y TIC de Quirónsalud, animó el debate con la afirmación de que el 60% de la actividad asistencial, en general, es útil, el 30% inútil y, de manera aún más preocupante, el 10% restante hasta dañina. Por lo que estimó que hay que tener mentalidad de 2024, por ser el año en el que vivimos,dado que la gente piensa en servicios y no en territorios, bases de datos o entrenamientos del personal o las máquinas. Al relativizar esa supuesta "centralizad" del paciente que ya no quiere que le hagan esperar meses para hacerse una prueba. Porque el paciente, como el resto de los ciudadanos, impulsa esos cambios para la mejora de los servicios. A pesar de lo cual, hacer poco con los datos, a su juicio, es como no hacer nada.

Luis Peñas García

Marcó distancias en el tiempo Luis Peñas García, director de los sistemas de información de la Orden Hospitalaria San Juan de Dios, para quien todo ha cambiado mucho desde que hace más de un siglo y cuarto los miembros de sus congregaciones utilizaban asnos o caballos para comunicarse. Singularidad que hoy explica por qué sus historias clínicas digitales son distintas entre centros, ya estén en Barcelona o Madrid. Pese a lo cual defendió que dicha historia debe ser del paciente y compartible con todos.

José Pérez Alonso

José Pérez Alonso, director de sistemas, tecnologías e innovación para la salud del Servicio Riojano de Salud, apostó por la anticipación con la integración de las historias clínicas y la estructuración de la información desde los dispositivos a pie de cama del paciente y la medición de la glucosa, por ejemplo. Aprovechando las líneas estratégicas marcadas por la consejería y la abundante disponibilidad de fondos que hoy existen para invertir.

Ismael Vargas Pina

Como director general de sistemas de información y comunicaciones del Servicio Andaluz de Salud (SAS), Ismael Vargas Pina señaló que la interoperabilidad mediante historia clínica única ya trabajada entre el Ministerio de Sanidad y las comunidades autónomas tiene ahora la tarea pendiente de abrirse a lo ancho para abarcar la sanidad privada, las residencias y otros espacios como las instituciones penitenciarias o los cuidadores de personas dependientes en servicios sociosanitarios. Actividad que debe beneficiarse del espacio europeo de los datos para uso primario de la información. Tarea a la que se aplica su región para poder incluir a los proveedores de salud de menor tamaño que los grandes grupos asistenciales de los que citó algunos. Pero con la satisfacción de haber incluido a los ciudadanos en el diseño de la estrategia digital andaluza con premio por parte de las plataformas de pacientes.

Rui Soares

Finalmente y desde la firma Agentifai de Portugal, su vicepresidente de ventas, Rui Soares, aseveró que las compañías no deben olvidar que el cliente es el paciente, siempre. Filosofía aplicada a sus asistentes digitales o chatbots que contestan por voz o texto a los pacientes con capacidad para su posterior seguimiento. Desde una forma de naturalización de la inteligencia artificial, sin latencias y con eficiencia, para aportar valor desde una historia clínica bien sistematizada para un fácil acceso para los pacientes, según explicó.