Investigadores de la Academia China de Ciencias han identificado once moléculas pequeñas que, aplicadas en animales de experimentación, preservan múltiples funcionalidades en la edad avanzada. Entre estas moléculas se incluye la carbamazepina, fármaco ya autorizado en el tratamiento de la epilepsia, y calmagite, un indicador de calcio y magnesio de ...
Investigadores de la Academia China de Ciencias han identificado once moléculas pequeñas que, aplicadas en animales de experimentación, preservan múltiples funcionalidades en la edad avanzada. Entre estas moléculas se incluye la carbamazepina, fármaco ya autorizado en el tratamiento de la epilepsia, y calmagite, un indicador de calcio y magnesio de uso común en el laboratorio. Ambos compuestos incrementaron los niveles de dopamina y serotonina y promovieron la longevidad, modificando favorablemente el tiempo de respuesta al alimento, que disminuyó, y previniendo además el deterioro tanto de la locomoción como de la disposición del macho al apareamiento.
La relevancia de los dos neurotransmisores en el efecto de ambos compuestos fue puesta de manifiesto en animales deficientes en la síntesis de dopamina y serotonina, en los que no se observó beneficio alguno. Shi-Qing Cai, director del estudio, afirma que tanto la carbamazepina como el calmagite también tuvieron un positivo impacto sobre la memoria y la capacidad de aprendizaje, e incluso mostraron un efecto protector en animales expuestos a agresiones ambientales, tales como luz ultravioleta, peróxido de hidrógeno o transición súbita a una temperatura elevada.
En experimentos ulteriores los científicos constataron que los compuestos mejoran la dinámica del calcio intracelular, con la consiguiente mejora en la funcionalidad muscular. Cai señala que ciertos canales de calcio resultaron ser indispensables en la mediación de este último efecto. El investigador concluye indicando que los hallazgos son consistentes con la noción, según la cual el sistema nervioso coordina la tasa de envejecimiento de todo el organismo, regulando el declive funcional de otros tejidos y, en consecuencia, la longevidad.