Resultados positivos con toripalimab y un virus oncolítico en el melanoma acral
La terapia iniciada en la fase neoadyuvante se asocia a una elevada tasa de respuesta patológica y baja recurrencia a los dos años, con tolerabilidad aceptable.
Investigadores de la Universidad de Pekín han llevado a cabo un ensayo de fase Ib en pacientes con melanoma acral resecable, tratados con el agente anti-PD-1 toripalimab y el virus oncolítico orienx010 antes de la cirugía, hallando que la terapia de combinación seguida de toripalimab durante un año se asocia ...
Investigadores de la Universidad de Pekín han llevado a cabo un ensayo de fase Ib en pacientes con melanoma acral resecable, tratados con el agente anti-PD-1 toripalimab y el virus oncolítico orienx010 antes de la cirugía, hallando que la terapia de combinación seguida de toripalimab durante un año se asocia a una tasa de respuesta radiológica y patológica del 33 y del 77%, respectivamente. Notablemente, la supervivencia libre de recurrencia a los dos años superó el 80%, periodo durante el cual el 73% de los pacientes se mantuvo libre de eventos, especialmente en los que al inicio presentaron niveles circulantes normales de lactato deshidrogenasa.
Este biomarcador también se asoció a la supervivencia global, según afirma Bin Lian, coautor del estudio. El científico prosigue indicando que la presencia de estructuras linfoides terciarias en el lecho tumoral, así como la mayor infiltración linfocitaria, fueron más frecuentes en los pacientes con respuesta patológica, sin que ésta mostrara correlación alguna con la evaluación tomográfica.
La tolerabilidad del tratamiento fue buena, ya que aunque todos los pacientes experimentaron efectos adversos, la mayoría fueron de grados 1 o 2. Lian señala que, a diferencia del melanoma cutáneo, el acral ha sido menos estudiado en el ámbito de las inmunoterapias, sin que existan terapias neoadyuvantes establecidas. En efecto, ensayos previos ya habían demostrado que la supervivencia tras la terapia con un agente anti-PD-1 es considerablemente inferior en el melanoma acral que en el cutáneo, acentuándose esta diferencia en las poblaciones de origen asiático. El científico concluye indicando que se requieren ensayos aleatorizados adicionales para confirmar los actuales resultados.
