Investigadores de la Universidad de Fudán han demostrado que el acondicionamiento antes del trasplante autólogo en el linfoma periférico de células T puede ser llevado a cabo mediante la combinación de ciclofosfamida, etopósido y dosis elevadas de mitoxantrona (CEM). En contraste con el régimen tradicional basado en carmustina, etopósido, citarabina ...
Investigadores de la Universidad de Fudán han demostrado que el acondicionamiento antes del trasplante autólogo en el linfoma periférico de células T puede ser llevado a cabo mediante la combinación de ciclofosfamida, etopósido y dosis elevadas de mitoxantrona (CEM). En contraste con el régimen tradicional basado en carmustina, etopósido, citarabina y melfalán, el uso de CEM incrementó en 40 meses la mediana de supervivencia global (SG), ofreciendo una supervivencia libre de progresión más de dos veces superior. Notablemente, la SG a los 5 años con CEM fue del 85%, frente al 59% con el acondicionamiento tradicional, observándose también la ventaja del CEM sobre la tasa de relapso, que fue significativamente inferior.
Jiexian Ma, codirector del estudio, afirma que estos beneficios no fueron a costa de la tolerabilidad, ya que la incidencia y gravedad de los efectos adversos, tanto hematológicos como de otros tipos, fue comparable en los dos grupos de acondicionamiento. El científico prosigue indicando que aunque la tasa global de integración de las células mononucleares tras el trasplante fue similar entre grupos, se constató un retraso significativo en el tiempo de integración de las plaquetas en el grupo con CEM, si bien no se registró ningún caso de fracaso del trasplante en ninguno de los grupos.
Ma subraya la relevancia de los hallazgos señalando que el régimen de acondicionamiento de referencia ya había sido asociado a una elevada tasa de relapso o de progresión a los tres años en estudios previos, a lo que se añade la considerable incidencia de toxicidad pulmonar causada por la carmustina.