Especialistas de toda España han debatido en Madrid sobre controversias terapéuticas en patología ginecológica en las XII Jornadas Nacionales “Actualizaciones en Ginecología y Obstetricia” organizadas por el Gabinete Médico Velázquez.
La experiencia positiva ya existente con el tratamiento prequirúrgico de los miomas uterinos sintomáticos con acetato de ulipristal 5 mg ha motivado que los ginecólogos tengan ahora puestas sus expectativas en un tratamiento crónico con este modulador selectivo de los receptores de la progesterona, “el que más mecanismos de acción ...
La experiencia positiva ya existente con el tratamiento prequirúrgico de los miomas uterinos sintomáticos con acetato de ulipristal 5 mg ha motivado que los ginecólogos tengan ahora puestas sus expectativas en un tratamiento crónico con este modulador selectivo de los receptores de la progesterona, “el que más mecanismos de acción sobre la etiopatogenia de los miomas uterinos tiene para afectar a estos tumores de naturaleza benigna”, que evite la cirugía, técnica invasiva y menos conservadora para la mujer.
Así lo ha manifestado el doctor Jorge Fernández Parra, ginecólogo del Hospital Virgen de las Nieves de Granada, durante la mesa Controversias terapéuticas en patología ginecológica celebrada en el marco de las XII Jornadas Nacionales Actualizaciones en Ginecología y Obstetricia del Gabinete Médico Velázquez, que han reunido en Madrid a ginecólogos de toda España.
Según este especialista, “el acetato de ulipristal es un buen tratamiento prequirúrgico tanto para recuperar a la paciente anémica como para la reducción del volumen del mioma”, y es que la anemia preoperatoria –matiza– “incrementa la mortalidad, la morbilidad y el riesgo de transfusión”. Además, el doctor Fernández Parra recuerda que, según han demostrado los estudios Pearl, un ciclo de tres meses con acetato de ulipristal 5 mg reduce el volumen del mioma un 30 ó 40%, reducción que puede llegar hasta el 70% según se va tratando a la paciente con más ciclos, lo que permite hacer –aclara el especialista– “una cirugía más conservadora y menos invasiva”.
Y esa reducción de volumen, según sus palabras, facilita que en miomas de más de 5 cm los ginecólogos puedan practicar, en vez de dos cirugías, sólo una. Es por todo ello que los especialistas confían en la aprobación del acetato de ulispristal 5 mg para el tratamiento crónico de los miomas uterinos. “El estudio Pearl IV, donde se compara el uso de 5 mg con 10 mg de acetato de ulipristal, tiene ese objetivo”, dice el ginecólogo del Hospital Virgen de las Nieves, que recuerda que, en términos de eficacia y seguridad, el Pearl III es concluyente: se controla el sangrado, se reduce el volumen de los miomas y el uso repetido cíclico optimiza los beneficios potenciales del acetato de ulipristal y no aumenta la incidencia de PAEC (Cambios Endometriales Asociados a los moduladores del receptor de la Progesterona), que son reversibles después de finalizar el tratamiento, tal y como demuestran los estudios Pearl I y II.