Los resultados de un ensayo de fase III en pacientes con cáncer de pulmón no microcítico en estadio extendido indican que la adición de socazolimab a la quimioterapia de primera línea, basada en carboplatino y etopósido, prolonga la mediana de supervivencia global (SG) en más de dos meses. A los dos años, casi la mitad de los pacientes seguían vivos, frente al 6% en el grupo tratado sólo con quimioterapia, constatándose una reducción del 20% en la tasa de mortalidad. La inmunoterapia con socazolimab también aumentó significativamente la supervivencia libre de progresión, si bien no se registraron respuestas completas en ninguno de los dos brazos de tratamiento. 

Shun Lu, investigador de la Universidad Shanghai Jiao Tong y director del estudio, afirma que la incidencia de efectos adversos de grado 3 o superior fue similar entre grupos, consistiendo principalmente en toxicidades hematológicas. No obstante, hubo más efectos adversos de tipo inmunológico y más abandonos del tratamiento por razones de tolerabilidad en el grupo tratado con socazolimab. El científico prosigue indicando que, en términos de SG, la eficacia de este nuevo agente biológico fue comparable a la mostrada por atezolizumab y durvalumab en los ensayos IMpower133 y CASPIAN, respectivamente. 

Este beneficio fue particularmente elevado en los pacientes de sexo masculino, en los que la mediana de SG fue más de 4 meses mayor que con la quimioterapia, asegura Lu. El investigador concluye señalando la posibilidad de que socazolimab pueda ofrecer un beneficio incluso mayor en futuros ensayos, ya que el actual incluyó en el grupo con socazolimab una proporción ligeramente más elevada de pacientes mayores de 65 años, en los que la inmunoterapia suele presentar menor eficacia.