Abordar el desafío mundial de las bacterias que causan infecciones de transmisión sexual (ITS) tales como clamidia, gonorrea, sífilis y también Mycoplasma genitalium sigue siendo un importante problema de salud pública. Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), cada año se notifican en todo el mundo cientos de millones ...
Abordar el desafío mundial de las bacterias que causan infecciones de transmisión sexual (ITS) tales como clamidia, gonorrea, sífilis y también Mycoplasma genitalium sigue siendo un importante problema de salud pública. Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), cada año se notifican en todo el mundo cientos de millones de nuevos casos de infecciones bacterianas de transmisión sexual (ITS). Muchas infecciones no se diagnostican debido a sus síntomas a menudo silenciosos, lo que contribuye a la transmisión, la enfermedad y las complicaciones como la infertilidad y el aborto espontáneo.
Con el aumento de las tasas de infección y la creciente resistencia a los antimicrobianos, comprender estos patógenos es vital para mejorar las estrategias de diagnóstico, tratamiento y prevención. Ese ha sido el objetivo que se han marcado un equipo internacional dirigido por la prof. Helena Seth-Smith, codirectora de genómica microbiana y directora de bioinformática en el Instituto de Microbiología Médica en la Universidad de Zúrich (UZH) (Suiza), y que ha contado también con la colaboración de la Universidad de Buenos Aires (Argentina).
Tecnología de vanguardia
Estos investigadores han logrado desarrollar una tecnología de vanguardia para la secuenciación del genoma y ha descubierto una cepa de clamidia no reconocida anteriormente. Para su hallazgo utilizaron sondas moleculares especialmente diseñadas, y detectaron ADN de ETS bacterianas de muestras clínicas, lo que permitió un análisis genómico de alta resolución. "Este método nos ayuda a entender cómo se propaga y se adapta la clamidia", indicó la prof. Helena Seth-Smith.
En concreto, según se publica en la revista 'Microbial Genomics', el equipo descubrió un linaje previamente desconocido de Chlamydia trachomatis en Argentina. Esta nueva cepa "ompA-genotipo L4", que tiene características genéticas diferentes de las tres cepas conocidas, se encontró en muestras rectales de hombres que tienen sexo con hombres. La clamidia se transmite principalmente a través de las mucosas durante las relaciones sexuales sin protección. Los pacientes con linaje L4 presentaban síntomas típicos como inflamación rectal, dificultad o urgencia para evacuar el intestino y secreción rectal.
"Nuestros hallazgos abren una nueva frontera en la comprensión de las ITS y ponen de relieve la naturaleza dinámica de las vías de transmisión y desarrollo de las ITS", afirmó Karina Büttner, de la citada Universidad. "Con estas herramientas, podemos apoyar mejor los esfuerzos de salud pública para controlar y prevenir estas infecciones", agregó.
Desde el punto de vista de estos investigadores, los nuevos métodos y una mejor comprensión de la composición genética de los patógenos permitirán identificar tendencias en la resistencia a los antibióticos, mejorar las pruebas de diagnóstico y adaptar los tratamientos a la creciente amenaza que representan las ITS.