Científicos de la Universidad Sun Yat-sen han llevado a cabo un ensayo de fase II en el que demuestran la eficacia del agente anti-PD-1 tislelizumab, en combinación con oxaliplatino y el derivado fluoropirimidínico S-1, administrados antes y después de la cirugía de resección en pacientes con adenocarcinoma de la unión gastroesofágica. El ensayo alcanzó su objetivo primario de respuesta patológica mayor, la cual fue constatada en el 50% de los pacientes en el momento de la cirugía. Adicionalmente, el 28% alcanzó respuesta patológica completa en el tumor primario, mientras que el 25% exhibió regresión patológica de nivel 0 o 1. 

Con una mediana de seguimiento de casi 22 meses, casi el 70% de los pacientes seguían vivos y libres de recurrencia, con una tasa de supervivencia global del 84% a los 18 meses. Ying-Bo Chen, codirector del estudio, afirma que la terapia fue bien tolerada, siendo la trombocitopenia el efecto adverso más común entre los de grado 3 o 4. 

El investigador prosigue indicando que la secuenciación de ARN antes y después de la fase neoadyuvante reveló que los pacientes con respuesta patológica mayor se distinguen por una mayor infiltración intratumoral por eosinófilos y menor de neutrófilos, linfocitos T portadores de receptores gamma/delta y linfocitos T reguladores, población esta última asociada a inmunosupresión. Chen concluye señalando que la terapia en este tipo de cáncer presenta desafíos, ya que además de ser frecuentemente diagnosticado en fases avanzadas, existen muy pocos ensayos aleatorizados, lo que resulta en ausencia de un estándar de tratamiento globalmente aceptado.