Investigadores de la Universidad Médica de Shanxi han determinado que la suplementación profiláctica con la forma sódica del sulfuro de hidrógeno (Na-H2S) atenúa el daño neuronal y las alteraciones del comportamiento, en ratas expuestas a un compuesto químico que causa síntomas similares a los de la esquizofrenia. El tratamiento restauró en diversa medida la actividad exploratoria, tanto la espontánea como la asociada a entornos nuevos, y potenció el interés por otros congéneres, así como la memoria social, espacial y de reconocimiento de objetos. 

Sha Liu, codirector del estudio, afirma que éste ha sido impulsado por observaciones realizadas en pacientes con esquizofrenia y sin desórdenes adictivos, en los que se constató una disminuida concentración de sulfuro de hidrógeno circulante. La diferencia en los niveles de este metabolito en comparación con los individuos sanos permite utilizarlo como biomarcador diagnóstico, con una sensibilidad de entre el 71 y el 98% y especificidad variable, asegura el científico. 

En el examen del mecanismo de acción, los investigadores hallaron que el Na-H2S protege a una línea celular de neuroblastoma de la toxicidad causada por el inductor químico de la esquizofrenia, previniendo la apoptosis, o muerte celular programada. Notablemente, este efecto antiapoptótico pudo ser confirmado en el hipocampo de los animales tratados, cuyas neuronas mantuvieron su estructura, número y organización, mostrando además una disminuida actividad de la caspasa-9, enzima esencial en la apoptosis. Liu concluye indicando que los hallazgos son consistentes con los de estudios previos, en los que los niveles de sulfuro de hidrógeno se encontraron reducidos, tanto en la circulación de pacientes depresivos como en el hipocampo de ratas con depresión asociada al estrés crónico impredecible.