Identificar las razones del repunte de tuberculosis entre la población infanto-juvenil que se viene observando desde 2021 ha sido el objetivo de un trabajo de investigación publicado en 'Eurosurveillance', la revista europea sobre vigilancia, epidemiológía, prevención y control de enfermedades infecciosas, en vísperas del Día Mundial de la Tuberculosis que ...
Identificar las razones del repunte de tuberculosis entre la población infanto-juvenil que se viene observando desde 2021 ha sido el objetivo de un trabajo de investigación publicado en 'Eurosurveillance', la revista europea sobre vigilancia, epidemiológía, prevención y control de enfermedades infecciosas, en vísperas del Día Mundial de la Tuberculosis que se celebra este lunes 24 de marzo.
Los investigadores analizaron las tendencias y características de los casos de tuberculosis pediátrica notificados en la UE/EEE entre 2015 y 2023 para identificar las razones de la actual situación. Caracterizaron cada grupo de edad comparando la proporción de tuberculosis pediátrica entre todos los casos de tuberculosis notificados durante dos períodos: la proporción media de notificaciones de 2015 a 2020 frente a los datos anuales de 2021 a 2023. Identificaron que la TB pulmonar fue la manifestación clínica predominante en todos los grupos de edad.
Factores determinantes
Los autores del estudio teorizan que un mejor diagnóstico y notificación de la tuberculosis pediátrica, los factores de riesgo social entre los niños nacidos en el país que informa y los cambios en los movimientos de población podrían haber jugado un papel en el aumento de esta patología en la UE/EEE.
Según algunos de los datos ofrecidos entre 2015 y 2023, se notificaron un total de 16.414 casos de tuberculosis pediátrica, con una media de 1.946 casos al año (rango: 1.142 en 2021 a 3.126 en 2016). Estos casos pediátricos forman parte del total de 393.104 casos de tuberculosis registrados en la UE/EEE durante este periodo.
Al analizar los datos de niños y adolescentes, los autores observaron una tendencia fluctuante durante este período: si bien hubo una disminución sustancial del 37 % entre 2019 y 2021, las notificaciones volvieron a aumentar gradualmente entre 2021 y 2023.
La mayor proporción de tuberculosis pediátrica se observó en niños de 1 a 4 años de edad (n = 5394; 33%) y la tuberculosis pulmonar fue la manifestación clínica predominante en todos los grupos de edad analizados.
Si bien ninguno de los países que proporcionaron datos sobre tuberculosis infantil en esos años mostró casos en los cuatro grupos de edad, 17 países informaron un aumento ≥5% en la proporción de notificaciones de tuberculosis pediátrica en al menos un grupo de edad. Cinco países (Estonia, Irlanda, Italia, Malta y Eslovenia) registraron aumentos en un grupo de edad, siete experimentaron un aumento en dos (Croacia, Chipre, Dinamarca, Luxemburgo, Portugal, Noruega y Rumanía) y cinco países informaron aumentos en tres grupos de edad (Alemania, Chequia, Eslovaquia, Hungría, Lituania y Alemania).
Los investigadores señalan que, durante el mismo período, en Europa se observó un aumento en las notificaciones de tuberculosis entre los mayores de 15 años. Esto también se observó en Estados Unidos, el Reino Unido y Canadá. Los tres países informaron aumentos significativos en las notificaciones de tuberculosis entre niños y adolescentes en 2022 y 2023.
Este análisis de la tuberculosis pediátrica, según sus autores, refuerza la comprensión de la carga de tuberculosis pediátrica en la UE/EEE y sugiere el impacto que causó la gestión de la pandemia de COVID-19 en el diagnóstico precoz sobre las tendencias generales.
No obstante, tal como consideran, "a pesar del aumento de la proporción de casos de tuberculosis pediátrica notificados en algunos países de la UE/EEE entre 2022 y 2023, el número de casos pediátricos notificados sigue siendo relativamente bajo", pero insisten en la necesidad de una vigilancia reforzada, un rastreo rápido de contactos y medidas preventivas para limitar la posible transmisión continua de la tuberculosis.