En España se calcula que más de dos millones de personas padecen disfagia orofaríngea (DOF), definida como la imposibilidad para tragar o deglutir alimentos líquidos y/o sólidos, que se produce por una afectación estructural o funcional de una o más fases de la deglución. Según estimaciones recientes, aproximadamente, el 90% de la población que sufre este trastorno no está ni diagnosticada ni correctamente tratada.

Una de las principales consecuencias de dicha disfagia es la desnutrición, presente en dos tercios de los pacientes que la sufren. Por ello, resulta fundamental realizar un adecuado cribado, diagnóstico y tratamiento nutricional individualizado. Así lo constata Rosana Ashbaugh, enfermera de la Unidad de Nutrición Clínica y Dietética del Hospital Universitario Príncipe de Asturias de Alcalá de Henares, de Madrid, y coordinadora del Grupo de Trabajo de Disfagia Orofaríngea de la Sociedad Española de Nutrición Clínica y Metabolismo (SENPE). 

En esta entrevista con 'IM Médico', esta experta ha compartido su experiencia, desde el punto de vista clínico, sobre el abordaje nutricional individualizado del paciente con disfagia. Además, ha analizado las mejoras y beneficios de la nueva fórmula nutricional de Meritene^® Clinical Diabet Dense, de Nestlé Health Science, expertos en ofrecer soluciones nutricionales para una correcta alimentación y mejora de la salud de las personas. 

Ashbaugh parte de que los pacientes que padecen disfagia y, como consecuencia de la misma, desnutrición "precisan de un abordaje muy personalizado. Para ello hay que dar una serie de pasos", como indica. 

"El primero de ellos es evaluar el grado de desnutrición que sufre el paciente para saber cómo tenemos que abordar su afectación. Por supuesto, es necesario evaluar el grado de alteración de la deglución, puesto que no todos los pacientes con disfagia presentan la misma severidad". A continuación, prosigue, "una vez realizado el cribado y la valoración nutricional, y conocido el grado de desnutrición del paciente, además de la dificultad deglutoria que tiene, es cuando iniciamos un tratamiento nutricional que contenga una fórmula con textura adaptada, que es bastante más seguro a nivel reológico y muy cómodo para el paciente".

La experta apunta como fundamental, además, utilizar en la práctica clínica los suplementos nutricionales de textura adaptada. "Una persona con desnutrición y trastornos de la deglución debe disponer de un suplemento adaptado a sus características deglutorias, especialmente, para garantizar la adherencia al tratamiento".

"A pesar de que tenemos espesantes de última generación espesar un nutriente no es tarea fácil y menos aun cuando lo tiene que hacer alguien en un domicilio y no sabe manejarse bien con ello. Lo más probable es que el nutriente ni salga fluido ni con la viscosidad requerida, sino con grumos, lo cual, al final, va a interferir, sin duda, en la adherencia al tratamiento nutricional del paciente", según su experiencia.

Suplementos nutricionales de textura adaptada para una deglución segura y eficaz

De acuerdo con Rosana Ashbaugh, estos suplementos nutricionales de textura adaptada están indicados, sobre todo, "en aquellos pacientes con algún grado de desnutrición o que tienen una ingesta de alimentos insuficiente y que, además, padecen trastornos de deglución".

Precisamente, hay que tener en cuenta, como subraya, que "muchas personas con este tipo de trastornos no son capaces de ingerir gran cantidad de alimentos. Por tanto, además de que el suplemento nutricional ofrezca un alto valor calórico y proteico, debe tener una densidad adecuada y una buena palatabilidad. Por otro lado, este suplemento nutricional no debe adherirse en la cavidad oral para que el paciente lo pueda proyectar hacia la parte posterior de su boca y de la garganta y, de esta forma, poder realizar una deglución segura y eficaz".

Asimismo, lo que se requiere para garantizar la seguridad del paciente "es que sean resistentes a la acción de la amilasa salivar de la boca, que cuando el paciente los introduzca en la cavidad oral en contacto con la saliva no se disgreguen y sigan manteniendo la viscosidad requerida. Eso es lo que nos da seguridad a la hora de ingerir el suplemento", desde su punto de vista.

Solución nutricional para pacientes con disfagia y diabetes

Ashbaugh también ha abordado en esta entrevista con 'IM Médico' el caso de las personas con disfagia y diabetes, situaciones clínicas altamente prevalentes que afectan a diferentes perfiles de sobre todo, neurológicos, neurodegenerativos o neurológicos agudos.Entonces, ¿qué ocurre cuando a un paciente con diabetes se le ofrece un suplemento nutricional que no favorece un buen control metabólico? Lo más seguro, desde su punto de vista, "es que a esa persona no se le va a poder controlar adecuadamente la diabetes y va a precisar más medicación para llegar a un buen control o, incluso, pasar de un tratamiento con antidiabético oral a necesitar insulina".

En cambio, "si disponemos de una solución nutricional específica que sí se adapta a esa patología y, además, a las características deglutorias del paciente, tenemos la fórmula perfecta que aporta múltiples beneficios", según subraya.

Para finalizar, Rosana Ashbaugh ha querido animar a Nestlé Health Science a que "sigan investigando para ofrecer soluciones nutricionales que mejoren el estado nutricional de los pacientes con disfagia. 

La importancia de la viscosidad del suplemento nutricional

Otro aspecto que resulta clave en relación a esta clase de suplementos nutricionales es el de su viscosidad, como destaca Ashbaugh. "Necesitamos un fluido, una viscosidad o un espesor que sea fácil de manejar, que al paciente no le resulte pegajoso en la boca y que pueda proyectarlo a la parte posterior". Para ello, según describe, "vamos a necesitar someter al paciente a una serie de pruebas como las de exploración clínica, entre ellas, la de volumen y viscosidad, muy utilizada en España, que nos va a servir, en cierto modo, para identificar cuál es la viscosidad más óptima para el paciente".

Actualmente, el método de exploración clínica, volumen y viscosidad (MECV-V) es el que se emplea para testar el grado de disfagia del paciente. "Este método, a través de un viscosímetro,utiliza la nomenclatura tradicional con tres tipos de viscosidades: néctar, miel, puding".

Sin embargo, Ashbaugh se inclina más por el uso de la escala International Dysphagia Diet Standardization Initiative (IDDSI, por sus siglas en inglés) basada en pruebas de flujo. "Soy más partidaria de que empecemos a incorporar en España, como se hace en Francia, en Inglaterra, en Alemania, en Estados Unidos, el sistema internacional IDDSI". 

La principal ventaja que ofrece esta forma de poder medir los fluidos, desde su punto de vista, "es la de poder hacerlo con una herramienta tan sencilla como una jeringuilla de 10ml. Asimismo, no se requiere disponer de un viscosímetro y, además, voy a poder compartir y comunicarme en el mismo lenguaje con compañeros de otros lugares, lo cual no sucede así cuando se utiliza la nomenclatura tradicional, que es bastante más complicada". 

Ashbaugh se muestra realmente convencida de que la escala IDDSI, "al ser una iniciativa internacional, en un periodo tiempo no muy largo va a quedar establecido como sistema descriptivo que nos ayuda a través de herramientas sencillas a comprobar el fluido de los líquidos y la textura de los alimentos". En este sentido, desde Nestlé Health Science ya se está incorporando la nomenclatura IDDSI en la gran mayoría de sus soluciones nutricionales para el paciente con disfagia. 

Beneficios de la nueva fórmula mejorada de Meritene^® Clinical Diabet Dense

Recientemente, Nestlé Health Science ha mejorado la fórmula de Meritene^® Clinical Diabet Dense (antes denominada Resource^® Diabet Dense) tanto a nivel de viscosidad, como a nivel nutricional, reforzando así sus beneficios en cuanto a eficacia, seguridad y control metabólico. 

Un aspecto importante a tener en cuenta es el de la viscosidad, como ha insistido Ashbaugh a lo largo de esta entrevista, y, en ese sentido, la nueva fórmula de Meritene^® Clinical Diabet Dense garantiza una deglución segura, siendo menos adherente a nivel orofaríngeo para reducir el residuo en boca y más fluida para ofrecer menos resistencia y un mayor control del bolo.

Para esta especialista el cambio de fórmula realizado es "todo un acierto porque se adapta a los atributos que tiene que tener un bolo para un paciente con disfagia".  "Y es que muchas personas tienen el concepto erróneo de que cuanto más espeso estén los alimentos o los líquidos, mucho mejor para los pacientes con disfagia orofaríngea, pero eso no es así".

Hay que tener presente, según explica, "que una mayoría de estos pacientes tiene dificultad en la propulsión del bolo, aparte de no disponer de mucha fuerza muscular, puesto que un gran número son personas que están desnutridas". Por tanto, como subraya, "siempre va a ser una ventaja que la nueva fórmula se adapte a esas características para que a esa persona le sea más fácil transportar ese bolo hacia la parte posterior de la boca".

Asimismo, a nivel de características nutricionales, en la nueva fórmula de Meritene^® Clinical Diabet Dense se ha reducido la cantidad de carbohidratos, así como el índice glucémico, se han aumentado los ácidos grasos mono y poliinsaturados, y se ha incrementado la cantidad de fibra soluble, indispensable para paciente con diabetes porque, como indica, "lo que hace esa fibra es enlentecer la absorción de la glucosa".  En definitiva, agrega, "son mejoras muy oportunas y que van a incidir positivamente en el control metabólico de los pacientes con diabetes y disfagia orofaríngea".

Respecto a la valoración final que Rosana Ashbaugh hace sobre las principales mejoras realizadas en la nueva fórmula, otorga a los factores de seguridad y menor adherencia un 10, mientras que al aspecto de la fluidez le concede un 9. También puntúa con un 9 la reducción de carbohidratos y el aumento de la cantidad de fibras o azúcar, y con un 10 el incremento de ácidos grasos mono y poliinsaturados.