Esta tecnología puede detectar de manera precoz la progresión de las enfermedades y acortar el tiempo entre el diagnóstico y el tratamiento.
Médicos e investigadores han participado en una jornada organizada por GE Healthcare durante la que han analizado las capacidades presentes y futuras de la tecnología PET/RM. Este nuevo avance integra de manera simultánea las tecnologías PET (Tomografía por emisión de positrones) y RM (Resonancia Magnética). Cuando se combinan el PET ...
Médicos e investigadores han participado en una jornada organizada por GE Healthcare durante la que han analizado las capacidades presentes y futuras de la tecnología PET/RM. Este nuevo avance integra de manera simultánea las tecnologías PET (Tomografía por emisión de positrones) y RM (Resonancia Magnética). Cuando se combinan el PET y la RM, los médicos pueden fusionar imágenes anatómicas y datos bioquímicos para identificar áreas de crecimiento celular, lo que puede acortar el tiempo entre el diagnóstico y el tratamiento.
Según Luis Campo, presidente de GE Healthcare Iberia, “el conjunto de ambas tecnologíasproporciona tanto la localización del tumor en el cuerpo del paciente como la actividad molecular del mismo. Los cambios en la función del tumor a menudo preceden a los cambios en su tamaño, por lo que los sistemas de PET/RM pueden permitir la detección precoz de la progresión de la enfermedad y la respuesta del paciente al tratamiento. Potencialmente, esto permite a los oncólogos modificar las estrategias de tratamiento para ayudar a mejorar la calidad de vida y los resultados generales de los tratamientos, a la vez que podría reducir los costes de tratamientos ineficaces", ha explicado.
Los expertos reunidos en la jornada han contado sus experiencias clínicas en el uso de PET/RM, confirmando su “prometedor futuro”. Así, el Dr. Juan Carlos Alonso, jefe de servicio de Medicina Nuclear del Hospital Gregorio Marañón, ha indicado que la PET/RM puede tener muy buena repercusión “porque no emite radiaciones ionizantes y, por eso, puede resultar una técnica muy válida en el estudio de tumores de mama, cerebro, adenocarcinoma en cabeza y cuello o en pelvis”. Sin embargo, Alonso ha destacado la necesidad de establecer unos nuevos protocolos para esta tecnología ya que, como apunta, “los protocolos empleados en oncología con la técnica PET/TAC no son válidos para PET/RM”. Posteriormente el Dr. José Luis Carreras, jefe de servicio de Medicina Nuclear del Hospital Clínico San Carlos de Madrid ha afirmado que la técnica PET/RM resulta “totalmente convincente y muy útil, sobre todo en pediatría”.
Por último, todos los participantes en el debate han estado de acuerdo en que, aunque el potencial de la PET/RM es indiscutible, esta tecnología debe abrirse hueco entre otras técnicas actuales. En este sentido, la Dra. Irene Burger, del Instituto de Diagnóstico y Radiología Intervencionista del Hospital Universitario de Zurich, y una de las pioneras en el uso de PET/RM, comentó que se debe buscar la complementariedad de las técnicas PET/TAC y PET/RM, pero no la redundancia. “Es preciso sacar la mejor información de cada técnica, lo que no es factible es que se tarde dos horas en hacer un escáner”, ha concluido la doctora.