La Fundación para la Investigación en Salud, FUINSA, organizó esta mañana una completa jornada sobre los últimos avances en vias de administración y presentaciones galénicas desde la perspectiva de las mejoras clínicas que suponen para los pacientes.
Hoy ha tenido lugar la jornada sobre “La Innovación Galénica, mitos y realidades”, organizada por Fuinsa, en la Asociación de la Prensa de Madrid. Durante la misma, y en presencia de algunos altos cargos del Ministerio de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad (Carlos Lens, Carmen del Castillo Vázquez), pudo compartirse un ...
Hoy ha tenido lugar la jornada sobre “La Innovación Galénica, mitos y realidades”, organizada por Fuinsa, en la Asociación de la Prensa de Madrid. Durante la misma, y en presencia de algunos altos cargos del Ministerio de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad (Carlos Lens, Carmen del Castillo Vázquez), pudo compartirse un análisis multifocal sobre los últimos avances experimentados en las formas de administración de medicamentos: oral, parenteral y demás. El encuentro fue organizado por la Fundación para la Investigación en Salud en colaboración con la Universidad de Alcalá, siendo dirigida por el profesor Francisco Zaragozá, catedrático de Farmacología de la Universidad de Alcalá y patrono de Fuinsa.
Tras las palabras protocolarias del citado Zaragozá, y el doctor Alfonso Moreno, presidente de fundación convocante, tomó la palabra el doctor Juan Tamargo. Como médico y catedrático de Farmacología de la Facultad de Medicina de la Universidad Complutense de Madrid (UCM) y director del Instituto de Farmacología y Toxicología (UCM-CSIC), aportó el soporte legal que sustenta el concepto de innovación galénica de interés terapéutico desde el punto de vista de la AEMPS. Para ello comentó algunos criterios orientadores tales como que dichas innovaciones galénicas deben contar en el mercado con otros productos con los que se puedan comparar, que deben justificar ventajas en tiempo de tratamiento o forma de administración y aportar estudios de valor terapéutico añadido en el momento de presentar la documentación optante a la clasificación como Innovación Galénica (IG). Junto a esto, Tamargo explicó las formas “retard” de liberación de principios activos en el organismo e informó de que, de todas las polipíldoras existentes hasta ahora, la única que ha tenido éxito ha sido la desarrollada por el Centro Nacional de Investigaciones Cardiovasculares (CNIC) de nombre Trinomia, desarrollada por el equipo del doctor Valentín Fuster y fabricada por los laboratorios Ferrer.
A continuación, el profesor titular del Departamento de Farmacología de la Universidad de Alcalá, Jesús Molpeceres, analizó las repercusiones clínicas que tiene la administración oral en los pacientes, asegurando que la innovación galénica permite adaptar el perfil de liberación a las necesidades terapéuticas, reduciendo el número de administraciones para facilitar la adherencia a los tratamientos. A esto añadió Guillermo Torrado, profesor titular del Departamento de Farmacología de la Universidad de Alcalá, que la galénica permite tratar de una forma más eficiente y más segura, logrando que el paciente viva más y mejor. En este afán, añadió, la Industria farmacéutica está demostrando una gran creatividad tecnológica, logrando combinaciones de principios activos antes impensables.
En materia de formas parenterales, la profesora titular del Departamento de Farmacología de la Universidad de Alcalá. Rosario Aberturas, destacó la novedad que supone incorporar antraciclinas y taxanos en nanosistemas como liposomas y nanopartículas de albúmina, para mejorar su eficacia y disminuir su toxicidad. Avances unidos a otros presentados por otras farmacéuticas galénicas como María Ángeles Peña y Begoña Escalera, que disertaron sobre otras formas de administración, como la intranasal, la pulmonar, las transdérmicas, la vaginal o la rectal. Finalmente, la profesora titular del Departamento de Farmacología de la Universidad de Alcalá, Lucinda Villaescusa, se ciñó a las formas de administración de los medicamentos biotecnológicos que ya suponen el 30% del arsenal terapéutico hospitalario. Según esta farmacéutica, los medicamentos biotecnológicos poseen características específicas que los diferencian del resto. Su farmacocinética condiciona la vía de administración, el régimen posológico y la eficacia clínica. Por lo que la tecnología farmacéutica debe desarrollar nuevas formulaciones que mejoren su perfil farmacocinético.
El doctor Emilio Vargas, profesor titular vinculado a la Universidad Complutense de Madrid, dentro del Servicio de Farmacología Clínica del Hospital Clínico San Carlos de Madrid, hizo algunas digresiones finales, demasiado genéricas para cerrar la jornada, sobre todo en comparación con las muy profundas presentaciones precedentes. Reflexiones que vinieron a completar las expuestas previamente por Carlos Lens, subdirector de calidad de medicamentos en el MSSSI, según las cuales “somos muchos los responsables de que no se preste la atención debida a los grandes avances que suponen algunas nuevas formas de administración y liberación de medicamentos”.
Como conclusión del encuentro pudo afirmarse que la innovación galénica, cuando se ajusta estrictamente a sus fundamentos, no sólo representa beneficios clínicos para los pacientes, sino que además supone ahorros muy significativos para el SNS.
PIE DE FOTO: El doctor Alfonso Moreno, presidente de Fuinsa, junto al catedrático de Farmacología de la Universidad de Alcalá, Francisco Zaragozá