Expertos nacionales e internacionales en el ámbito de la innovación tecnológica se han reunido en Madrid en la ‘Jornada de Innovación Sanitaria y Tecnología Digital’, con el objetivo de analizar y discutir las oportunidades, barreras y retos de la aplicación de las tecnologías de la información y de la comunicación en la asistencia, docencia, investigación y gestión sanitaria. Ha quedado claro que la innovación tecnológica sirve para hacer cosas que ahora no podemos hacer y que sólo se puede innovar si adoptamos una nueva manera de pensar.
La Jornada de Innovación Sanitaria y Tecnología Digital, celebrada este jueves en el auditorio del Hospital Clínico San Carlos, se ha convertido en un punto de encuentro para el debate entre innovadores, emprendedores y profesionales sanitarios interesados en la innovación tecnológica y la transformación digital de los sistemas sanitarios. Ante ...
La Jornada de Innovación Sanitaria y Tecnología Digital, celebrada este jueves en el auditorio del Hospital Clínico San Carlos, se ha convertido en un punto de encuentro para el debate entre innovadores, emprendedores y profesionales sanitarios interesados en la innovación tecnológica y la transformación digital de los sistemas sanitarios. Ante los retos sociosanitarios a los que se enfrentan las sociedades en el siglo XXI, la respuesta adaptativa requiere el diseño y la implementación de estrategias de innovación y de transformación digital de la Sanidad. La ha inaugurado Emilia Sánchez Chamorro, directora general de Planificación, Investigación y Formación de la Comunidad de Madrid. “El sector sanitario tiene que estar ligado al campo de la investigación. Tenemos que trabajar, tenemos que innovar. Tenemos que trabajar conjuntamente las administraciones”, ha declarado. Después, ha asegurado que Madrid dispone de una potente red de recursos y que en su Dirección General apuestan por la investigación y por la innovación sanitaria.
Julio Mayol, director de la Unidad de Innovación del Instituto de Investigación Sanitaria San Carlos (IdiSSC) y co-director del Consorcio Madrid-MIT Mvision, ha impartido la conferencia inaugural El valor para los pacientes. Mejores resultados y mejor calidad de vida. En ella, ha hecho un recorrido de los avances en Sanidad y de cómo se organizan los modelos sanitarios. Del modelo en el que el médico de Primaria está en el centro, que ha tenido España desde principios de los 80, ha señalado que “la provisión de servicios sanitarios era el objetivo del modelo”.
A su juicio, ahí está el problema, porque cuando se intenta hacer algo diferente, hay un problema. “Luchamos contra lo que somos. Los ciudadanos ponen su dinero para que diferentes islas hagan su servicio. Hay unos recursos que son finitos. Y lo que medimos son outputs. Es decir, cuántas hernias hemos operado. Pero, no sabemos si los pacientes están mejor o peor. Medimos indicadores de proceso, no resultados de Salud”, ha lamentado. “O cambiamos nuestra misión, y eso requiere innovación, o tenemos un problema. Decimos que queremos poner al paciente en el centro del sistema, pero es el médico el que está en el centro”, ha añadido. Según sus palabras, hacer más no es necesariamente mejor.
“En 2008, nos dijeron que no había más dinero, y aprendimos que no hay ninguna relación entre lo que se gasta en Salud y los resultados. La respuesta fue aumentar la productividad. Pero, tenemos mala suerte: los sistemas sanitarios no aumentan su productividad”, ha descrito Mayol. Ha explicado que la innovación tecnológica sirve para hacer cosas que ahora no podemos hacer. “Sólo se puede innovar si adoptamos una nueva manera de pensar”, ha subrayado. Ha manifestado que los problemas actuales no se van a resolver con más genética sino con más tecnología, que tenemos que utilizar la tecnología no sólo para ser precisos sino para ser exactos. Es decir, la tecnología ha de crear valor. Su Unidad de Apoyo a la Innovación tiene por objetivo la transformación del sistema, que implica innovación tecnológica pero también innovación social y del modelo. “Hay que adoptar nuevas formas de pensar, lo que conlleva cambios sociales que son difíciles de lograr. Es ahí donde hay que actuar. Para ver los resultados de la innovación”, ha pronunciado. Con todo, los recursos utilizados en innovación movilizan a la sociedad y tienen un fuerte retorno.
En una mesa redonda, se han abordado diferentes proyectos innovadores. Bo Hu, investigador principal de Intelligent Society Platform Research Division, de Fujitsu Labs Europe, ha hablado del Proyecto Hikari. Ésta es una palabra japonesa que significa “luz”. El proyecto, relacionado con la salud mental, es una colaboración estratégica entre Fujitsu y la Unidad de Apoyo a la Innovación. Ha comentado que un tercio de los adultos europeos sufre de depresión, que es un problema que nos afecta a todos, ya sea de forma directa o indirecta. Es un problema que reduce la calidad de vida, la productividad y la comunicación con los demás. “En Madrid, también constituye un problema grave la salud mental. Afecta considerablemente a la tercera edad y a las personas en edad productiva. La salud mental, en términos generales, no cuenta con demasiado apoyo por parte de las tecnologías. El proyecto Hikari persigue ofrecer mejoras para mejorar la prestación de servicios en este ámbito”, ha contado. Conlleva una mejor utilización de los datos históricos para identificar cuellos de botella y el objetivo fundamental consiste en ofrecer a los pacientes la mejor asistencia posible.
Arturo González Ferrer, investigador doctor de la Unidad de Innovación del IdiSCC, ha detallado el proyecto de Ayuda a la Decisión Clínica mediante vías clínicas inteligentes y minería de datos, que puede ayudar a la hora de introducir datos clínicos sin necesidad de tener que consultar las guías. Los requisitos que ha glosado para este sistema han sido: “Hay que dotar a los sistemas de conocimiento de evidencia científica. Hace falta empatía intelectual, porque tienen que trabajar conjuntamente ingenieros y médicos. Tiene que contemplar el criterio del experto. Un sistema no puede decir que hay que hacer una cosa si no ofrece diversas opciones y argumentos. Hay evidencia, pero hay un proceso de argumentación, y lo tiene que ofrecer el sistema. El tercer requisito es contemplar el workflow clínico. Un cuarto criterio es que las alertas que produce el sistema han de ser selectivas”. Mayol ha vuelto a tomar la palabra para describir el proyecto del sistema de apoyo a la decisión en Farmacia Hospitalaria, que está en una fase inicial.