Su uso se asocia a menos fracasos en la terapia cuando la deshidratación es mínima en niños mayores de 2 años.
La rehidratación oral con electrolitos es la terapia recomendada en niños con vómitos y diarrea causados por gastroenteritis leve. Tradicionalmente, los zumos de frutas y las bebidas azucaradas han estado contraindicados por su elevado contenido en azúcar y su baja concentración de sodio. Ahora, científicos de varios centros de investigación ...
La rehidratación oral con electrolitos es la terapia recomendada en niños con vómitos y diarrea causados por gastroenteritis leve. Tradicionalmente, los zumos de frutas y las bebidas azucaradas han estado contraindicados por su elevado contenido en azúcar y su baja concentración de sodio. Ahora, científicos de varios centros de investigación canadienses han publicado en la Revista de la Asociación Médica Americana los resultados de un estudio que desafía esta noción.
En el ensayo tomaron parte 647 niños de 6 a 60 meses de edad con gastroenteritis aguda y deshidratación leve. La mitad de ellos recibió zumo de manzana diluido con agua en proporción 1:1 ya en la ambulancia de camino al hospital, mientras que la otra mitad recibió una solución electrolítica del mismo color y sabor a manzana. Tras el alta, los del primer grupo siguieron tratamiento con zumo de manzana o su bebida favorita, mientras que los del segundo grupo siguieron tomando la misma solución electrolítica.
El uso de zumo de manzana se asoció a una menor tasa de fracaso de la terapia, que fue del 10% en comparación con el 26% en el otro grupo, si bien no hubo diferencias significativas en niños de menos de 2 años de edad.