La primera presentación en el 16º Congreso Mundial del Dolor de los estudios clínicos de fase II realizados con el MR309, pone de manifiesto los importantes efectos beneficiosos de un nuevo analgésico en el tratamiento de los pacientes con neuropatía periférica de distintas etiologías.
Los nuevos datos del estudio de fase II presentados por primera vez en el 16º Congreso Mundial del Dolor han demostrado que el innovador antagonista de sigma-1 de primera línea MR309 presenta un prometedor perfil de eficacia en el tratamiento de distintos tipos de neuropatía periférica. En un estudio realizado ...
Los nuevos datos del estudio de fase II presentados por primera vez en el 16º Congreso Mundial del Dolor han demostrado que el innovador antagonista de sigma-1 de primera línea MR309 presenta un prometedor perfil de eficacia en el tratamiento de distintos tipos de neuropatía periférica. En un estudio realizado con pacientes con cáncer colorrectal tratados con las pautas terapéuticas habituales basadas en el oxaliplatino, la proporción de pacientes que desarrollaron síntomas neuropáticos suficientemente graves para limitar sus actividades diarias de cuidado personal fue solo del 3,0% en el grupo MR309, en comparación con el 18,0% en el grupo placebo (p=0,046).
La neuropatía periférica inducida por la quimioterapia (NIQ) es la complicación más prevalente del oxaliplatino y un habitual efecto secundario limitante de la dosis que altera la capacidad funcional y reduce la calidad de vida. A pesar de que se han probado tratamientos neuroprotectores contra la NIQ, hasta la fecha ninguno ha demostrado claramente su eficacia. Este es el primer informe sobre la eficacia de un fármaco que actúa específicamente sobre los supuestos mecanismos fisiopatológicos implicados en la neurotoxicidad y el dolor neuropático, y representa un auténtico avance y una innovación en el campo del desarrollo de los analgésicos.
Según el Dr. Harry Smith, director médico de Mundipharma International, “la neuropatía periférica inducida por la quimioterapia es muy difícil de abordar debido a la actual falta de tratamientos eficaces. Los resultados de este estudio de fase II indican que el MR309 podría utilizarse como tratamiento complementario de las pautas terapéuticas de quimioterapia basada en el oxaliplatino. Al reducir el riesgo de estos pacientes de desarrollar síntomas neuropáticos graves, el MR309 podría producir una disminución significativa del número de pacientes que tienen que suspender el tratamiento con oxaliplatino”.
En un segundo estudio, realizado con pacientes con dolor neuropático postquirúrgico crónico, se administraron dosis repetidas de MR309 que consiguieron un alivio del dolor clínicamente significativo. El MR309 se relacionó con reducciones estadísticamente significativas de la intensidad media del dolor en 24 horas y del “peor dolor” durante los días 15 a 28, en comparación con el placebo. El porcentaje de pacientes que necesitaron medicación de rescate fue superior en el grupo placebo que en el grupo MR309 en todas las visitas durante el tratamiento del estudio, así como también en la visita del día 35 una vez terminado el tratamiento. En general, los resultados de todos los demás criterios de valoración de eficacia basados en escalas análogas visuales y cuestionarios mostraron mayores reducciones del dolor con el MR309 comparado con placebo.
Los análisis programados por localización de la cirugía mostraron una mejor respuesta al MR309 en los pacientes con dolor quirúrgico no raquídeo, probablemente debido a que el dolor de las operaciones de columna suele ser mixto (y no solo neuropático).
El MR309 también se está investigando como tratamiento del dolor postoperatorio agudo. Un eficaz control de este tipo de dolor es esencial para el cuidado de los pacientes quirúrgicos y para reducir el riesgo de complicaciones postoperatorias