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Autocrítica de psiquiatras y neurólogos en el Día Mundial de la Salud Mental

La Confederación Salud Mental España se ha propuesto este año transmitir a la sociedad la idea de que un trastorno psíquico no define a una persona en su conjunto, al tiempo que destacados especialistas han hecho autocrítica sobre la forma tradicional de abordar la patología psiquiátrica.

10/10/2016

El presidente de la Confederación Salud Mental España, Nel A. González Zapico, dio la bienvenida este lunes, 10 de octubre, a un auditorio lleno de pacientes con trastorno mental, familiares, amigos y simpatizantes con el objetivo de celebrar este año el Día Mundial de la Salud Mental de una forma ...

El presidente de la Confederación Salud Mental España, Nel A. González Zapico, dio la bienvenida este lunes, 10 de octubre, a un auditorio lleno de pacientes con trastorno mental, familiares, amigos y simpatizantes con el objetivo de celebrar este año el Día Mundial de la Salud Mental de una forma distinta. En esta ocasión el lema elegido por votación popular fue “Soy como tú aunque aún no lo sepas” y el lugar para compartir experiencias, temores y esperanzas el Ateneo de Madrid. Para la apertura se contó con Susana Camarero Benítez, secretaria de Estado de Servicios Sociales e Igualdad, quien animó a los presentes a trabajar activamente por la emancipación y empoderamiento de los pacientes, así como a que todos los sectores sociales trabajen por desterrar el estigma que añade mayor peso a las propias patologías. González Zapico agradeció el tono intimista y respetuoso de la secretaría de Estado, admitiendo que parece ir calando en la clase política cierta sensibilidad hacia los problemas de los pacientes. Sin embargo, el presidente de la confederación también lamentó que, de momento, lo único que se está recibiendo de los poderes públicos sean buenas palabras, al tiempo que no arbitran recursos para mejorar los servicios asistenciales y sociosanitarios para los pacientes con patología mental. Con ese “del dicho al hecho hay mucho trecho”, González Zapico puso el ejemplo que España todavía carece de una estrategia nacional de salud mental digna de tal nombre.

La mesa destinada a debatir sobre la “Participación en Salud Mental: de la teoría a la práctica”, estuvo compuesta por 2 psiquiatras y un neurólogo. El primero de ellos, Manuel Gómez Beneyto, psiquiatra de 80 años en el presente y coordinador de la Estrategia de Salud Mental del Sistema Nacional de Salud 2007, tuvo palabras muy duras para su especialidad. Concretamente, acusó a los psiquiatras de haber dejado sin esperanza al paciente con patología mental por espacio de más de un siglo, a pesar de que los manicomios fueron clausurados en los años 80 del siglo pasado. Habiendo estado sometidas las personas afectadas a un asfixiante atmósfera de paternalismo, estigmas y autoestimas dañadas. Para Gómez Beneyto la enfermedad mental quiebra en tal medida los sueños de los pacientes que aunque hubiera una píldora mágica, o bala de plata, para curar en una sola toma cualquier psicosis, subyacerían problemas graves como el estigma, la inadaptación social o familiar, la escolarización perdida, el retardo psicomotor, los problemas sexuales y tantos otros daños acarreados muchas veces por las enfermedades mentales. Con la misma claridad y contundencia el veterano psiquiatra recomendó que el movimiento de pacientes entre de forma efectiva a participar en el Centro de Investigación Biomédica en Red de Salud Mental (CIBERSAM), donde tiene mucho que aportar. Completo la visión de la Psiquiatría el doctor  Vicente Ibáñez, representante del Grupo de Derechos Humanos y Salud Mental de Andalucía. Fundamentalmente, su intervención sirvió para conocer el documento PAD, que sirve para registrar los deseos y preferencias de los pacientes en su itinerario asistencial (profesionales sanitarios, pautas de medicación, familiares de contacto, etc).

Por su parte, el doctor Bernabé Robles, neurólogo del Parc Sanitari Sant Joan de Déu, relativizó los diagnósticos psiquiátricos, asegurando que cualquier ciudadano podría obtener múltiples variantes, si distintos profesionales sanitarios les aplicaran el DSM-5, Manual Diagnóstico y Estadístico de los Trastornos Mentales. Como medida positiva, sin embargo, propuso que pacientes y clínicos trabajen las decisiones anticipadas de los primeros en un clima de respeto y confianza mutuos. Finalmente, Robles también avisó de los rasgos obsesivos, compulsivos y hasta depresivos que a veces acompañan a la profesión médica.

El momento más emotivo de la jornada fue cuando los miembros del Comité Pro Salud Mental en Primera Persona dio lectura a un manifiesto dramatizado en el que se denuncia, en forma de diálogo, que el 75% de las personas con enfermedad mental se ha sentido discriminado en alguna faceta de su vida. Esa experiencia fue corroborada por la primera mesa de expertos, que llevó por título “Grupos de iguales. Un modelo de apoyo”; siendo sus participantes Hernán Sampietro, miembro de la asociación Activament, Curro Catena, representante de la asociación Salud Mental Ceuta y por Begoñe Ariño, facilitadora de los modelos de formación llamados Prospect. Mientras que el primero diferenció entre los servicios sociales y asistenciales, por un lado, y el movimiento asociativo, por otro, el representante ceutí denunció que su ciudad autónoma sólo dispone de 2 psicólogos y 2 psiquiatras para atender a toda la población. Por el contrario, la facilitadora Ariño aseveró que España tiene una buena asistencia en Salud Mental, sobre todo en comparación con muchos lugares del planeta donde nadie acompaña a nadie en sus duelos o hay conflictos sociales o bélicos que hacen imposible cualquier tipo de atención sanitaria o psicosocial.

Pie de Foto:Manuel Gómez (psiquiatra), Bernabé Robles (neurólogo del Parc Sanitari San Joan de Déu),  Vicente Ibáñez (psiquiatra del grupo de Derechos Humanos y Salud Mental de Andalucía) y Gonzalo Nielfa (del comité Pro Salud Mental en Primera Persona)

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