IM MÉDICO #35

im MÉDICO | 35 97 En qué poblaciones aporta beneficios Preguntamos al Dr. José Luis Neyro en qué pobla- ciones se ha demostrado que el uso de vitamina D aporta beneficios óseos/extraóseos. “Para empezar por lo más evidente, diremos que es el tratamiento prínceps del raquitismo y de la osteomalacia por lo que las personas o niños afectas dependen de esta vitamina”, aclara. Al tiempo, “su concurso es indispensable en el ma- nejo de la osteoporosis”. Los fármacos disponibles hoy en día para el tratamiento de esta enfermedad se prescriben acompañados de dosis variables de vi- tamina D para obtener un mayor efecto, por lo que esta vitamina deberá acompañar, si procede, cada prescripción de tratamiento de osteoporosis. Ade- más, es obligada su suplementación en los enfermos renales. También se benefician de su suplementación todos los síndromes de malabsorción por enfermedades inflamatorias intestinales o los sujetos sometidos a cirugía bariátrica contra la obesidad, cada vez más frecuente. En otro orden de cosas, cuando está deficitaria, tanto en uno como en otro miembro de la pareja que están en tratamientos de fertilidad, “reponer esos niveles mejora espectacularmente las tasas de embarazo en reproducción asistida”. “ Afortunadamente, estácreciendo lapreocupaciónde los sanitarios españolespor laenormevinculaciónqueestahormonaparece tener con muchos y diferentes aspectos de la salud a lo largo de toda la vida ”, declara. Añadeque laúnicamanerade saber cómoestán los niveles de un determinado paciente es medirlos en una sencilla analítica. Esto se hace cada día más. Enfermedades relacionadas a su déficit Cuestionado por las enfermedades que se vinculan a niveles bajos de vitamina D, el Dr. Neyro apunta que conocemos desde antiguoque sudéficit durante el desarrollo lleva al raquitismoy la osteomalacia, por falta demineralizacióndel hueso. Asimismo, la deficiencia de esta vitamina durante el embarazo se ha asociado con resultados adversos tanto para la madre como para el feto. Además, como es responsable de la absorción del calcio de la dieta en el intestino, resulta imprescindible para el manteni- miento de una adecuadamasa ósea con el riesgo importante de osteoporosis cuandono se consiguenniveles adecuados. Por otro lado, se podría enlazar con síndrome de fatiga crónica.“ Cada vez se relaciona más la vitamina D con una adecuada fertilidad, tanto femenina comomasculina ”, comunica. “ No hemos hechomás que empezar a conocer todo su potencial, lomejor podría estar aún por llegar ”, manifiesta. ¿El que usemos en verano una fotoprotecciónmás fuerte puede ser una de las causas de que se estén detectando últimamente más casos de niveles bajos de vitamina D en las consultas? Res- ponde que,“ ciertamente, los fotoprotectores conescala superior al factor 8 parece que invalidan la acción de la radiación ultravioleta sobre la piel para fabricar la provitamina D ”. Eso sí, afirma que “ el empleo de fotoprotectores es imprescindible ”. El Dr. Neyro sostiene que, “ en general, no debemos confiar en el sol, queno tomamos odel quenos protegemos sensatamente, para conseguir buenos niveles de vitamina D ”. Explica que la radiación necesaria a diario está en el espectro de lo cancerígeno. Es decir, es fundamental dejar de confiar en el sol o en aquello de que esto lo arreglo yo con siete días de playa.“ Noes ciertoyademás es peligrososeguir confiandoenel sol oen labondaddenuestroclima ”, avisa.“ Si ustedestáenedadde riesgo, si es niño, si estáembarazada oquiere estarlo, si llegó sumenopausiao si estáustedyaen los años de plata, acuda a medir sus niveles de vitamina D y que su médico actúe en consecuencia ”, recomienda. Hay que verificar los niveles en sangre de 25 hidroxi-vitamina D para poder abordar el tema de su reposición si fuera necesario. ¿Qué podemos hacer para que la vitamina D se sintetice mejor? Contesta que el mantenimiento de la salud en general es com- plejo y que precisa sobre todo una dieta adecuada a cada edad y a cada necesidad. “ En el caso de la vitamina D, la dieta sólo nos va a proporcionar el 20% de la cantidad necesaria. Deberemos te- ner un hígado sano y un riñón competente para obtener suficiente metabolito activo ”, expone. Insiste en que, por encima de los 50 años, la capacidad del organismo para sintetizar esta hormona va decayendo. Por ello, es preciso medirla en sangre y reponer cuando haga falta, sin más. Son muy pocas las controversias que suscitan su reposición cuando los niveles de vitamina D son insuficientes o están defi- citarios.“ Es la norma para todos los enfermos renales, por ejemplo, cuyo riñón no fabrica la cantidad suficiente, o para cualquiera que esté en tratamientopor unaosteoporosis ”, señala el Dr. Neyro. Más controversia es la fortificaciónde los alimentos paraproporcionar suplementos de vitaminaDa toda lapoblación. Cuentaque seha debatidomucho, argumentando que España es una regiónmuy soleada. “ Sin embargo, nuestros niveles de vitamina D parecen ser menoresque losde lapoblaciónescandinavacomosuecaodanesa, lugares en losque lasautoridades sanitarias sí tomaronhaceaños la decisiónde fortificar los alimentos lácteos convitaminaD ”, reflexio- na. Sin entrar en ese debate, considera que sería suficiente con que todas las personas que se acercan a su médico, al igual que se les mira una analítica para descartar la anemia, se compruebe su nivel de vitamina D. Sobre Hidroferol 0,266 mg cápsulas blandas, de Faes Farma; el Dr. Neyro comenta que “ las innovaciones galénicas que permiten un acercamientomás amigable a una determinadamedicación son siemprebienrecibidastantoporlosprescriptorescomoporlospropios pacientes ”.“ De acuerdoanuestros propios estudios de investigación, el motivo fundamental de abandono de un determinado tratamien- to por parte de un paciente afecto de enfermedades crónicas es la polimedicación ”, advierte. Asegura que la situación es muchomás frecuente de lo que podría uno imaginarse a priori y que facilitar el cumplimiento de un determinado tratamiento con una forma galénica más cómoda permite que la adherencia al tratamiento sea más sólida y mejore por ende los resultados de éste. :