IM MÉDICO #44

im MÉDICO | 44 [ ANUARIO 2020 ] 95 E n laprimeraoladel coronavirus, lapoblaciónacudíapuntual a las 20h a sus balcones, terrazas y ventanas para aplaudir a esos‘héroes’quemirabana lamuerteadiario. Esos aplausos sediluyeron tanprontocomo las restricciones se relajarony los ciu- dadanos pudieron salir a la calle. Sin embargo, los héroes seguían siendo héroes (siempre lo han sido) y seguían trabajando como héroes, aunque la sociedad ya no se acordase de ellos. Sin embargo, esos héroes, el personal sanitario que estuvo y está en primera línea, tienen una diferencia respecto a los héroes de cienciaficción: sonpersonas humanas. Como todos y cadaunode losquenosquedamosencasaconfinados. Sonpersonashumanas, con sus límites físicos, pero también con sus límites psicológicos. El personal sanitario lleva un año luchando a diario contra una enfermedad de la que, al principio, no se sabía nada. Empezar de cero. Pruebayerror.Habíaquedescubrir cómosetransmitíael virus, cuáles eran los fármacosquepodían funcionar parael tratamiento. La incertidumbre era real los primeros meses de pandemia. Ese marzo, esos inicios, en losquenohabíaEPIs, nohabía respiradores, y los sanitariosdebíantomardecisiones complicadas sobreaquién sepodíaatender.Durante laprimeraola, losprofesionalessanitarios hicieronunesfuerzodescomunal, que tuvieronquevolver a repetir en lasegundaola, cuandotodavíanosehabíanpodidoreponerdel esfuerzo hecho. Su salud física estaba contra las cuerdas -mareos, dolores de cabeza o de estómago fueron algunos de los síntomas más comunes-, pero también su salud mental -insomnio o estrés postraumático-. Las preocupaciones fundamentales de los sanitarios durante la pandemia, señalaron en el Congreso Nacional Interdisciplinar Covid-19, fueron el colapso del Sistema Nacional de Salud, la posibilidad de infectar a compañeros, familiares o infectarse uno mismo, además de las medidas de protección y seguridad en su labor profesional. Arango López , del Servicio de Psiquiatría del HospitalBellvitgedeBarcelona , señalóquesonnecesariasmediasde apoyoa los trabajadores sanitarios:“ Hayuncansancioacumuladoy hay que conocer y cuidar mejor a los grupos vulnerables y grupos de riesgo dentro de la población sanitaria, con programas preventivos y detección precoz, que aseguren además su confidencialidad, para lograr así avanzar en su atención en saludmental y emocional ”. La ola psicológica En Cataluña, por ejemplo, según los resultados preliminares de un estudio de la Fundación Galatea, el Consejo de Colegios de Médicos de Cataluña (CCMC) y las profesoras Nuria Mas (IESE) y Judit Vall (Instituto de Economía de Barcelona IEB-UB), un 42% de los sanitarios decía sentirse más cansado y menos preparado para hacer frente a la segunda ola. El agotamiento de la primera pandemia fue tal, que hasta el 24% de los 1.648 médicos parti- cipantes aseguraron que se habían cuestionado seguir con el ejercicio de la profesión. Por otra parte, en cuanto al agotamiento físico y mental de los participantes, este se analizó midiendo la frecuencia en tres momentos diferentes (antes de la pandemia, durante la primera ola y en julio/agosto) en las que experimentaban agotamiento físico y emocional, cefaleas, dolor de estómago o dolor de es- palda; así como capacidad para hacer frente a los problemas, Dudoso primer puesto Por su trabajo, y por las condiciones en las que lo han tenido que desempeñar durante mucho tiempo, los profesionales sanitarios españoles son de los que más se han contagiado en el mun- do. En concreto, en lo que llevamos de pandemia más de 110.000 profesionales del sector han pa- sado el Covid-19. Según los datos del Ministerio de Sanidad, las comunidades con más infectados han sido Cataluña y Andalucía. Asimismo, un centenar de profesionales sanitarios han perdido la vida en nuestro país por coronavirus.

RkJQdWJsaXNoZXIy NTI5ODA=