IM MÉDICO #44

im MÉDICO | 44 [ ANUARIO 2020 ] 99 de sus implicaciones éticas y sociales, estas nuevas tecnologías, que incluyen la capacidad de crear nuevos organismos, podrían dañar a las personas a las que deben ayudar” . Y es que la Salud Digital trae consigo amplias posibilidades para el Sistema Sanitario, pero también nuevos retos a los que habrá que ir poniendo solución para su correcta implementación y utilización por parte de sani- tarios y pacientes. Telemedicina Probablemente, cuando se piensa en Salud Digital lo primero que viene a la mente es la telemedicina. Durante el 2020, la tele- medicina ha permitido a médicos seguir pasando consulta, y a pacientes continuar con rehabilitaciones, tratamientos y visitas. “ SoloenTopDoctorsduranteel picode lapandemiahubocasi 1.500 nuevos médicos y centros activando el servicio de telemedicina en tan solo tres semanas, y el número de consultas médicas a través de ella se multiplicó por 60. Cuando en abril las citas médicas pre- senciales cayeron más de un 70% con respecto a los dos primeros meses del año, los servicios de telemedicina sedispararon, llegando a las 44.000 consultas online”, explica Alberto E. Porciani , CEO y Fundador de Top Doctors . Desde la compañía auguran que este año, el número de teleconsultas seguirá aumentando, siendo ya una práctica “ interiorizada entre los pacientes” . Noobstante, antes de la irrupcióndel Covid-19, algunos estudios demostraron los beneficios de implementar la teleconsulta, ya sea a través de teléfono o de videollamada. Su uso facilita la reducción de las listas de espera y de las estancias hospitalarias, a la par que evita desplazamientos, por lo que supone una opti- mización de recursos. Asimismo, hace más partícipe al paciente, y democratiza el acceso a la salud de pacientes que no viven en grandes ciudades. Dos ejemplos La puesta en marcha de un modelo de e-consulta en cardiología mejora el acceso a la atención sa- nitaria especializada reduciendo un 21% las listas de espera. Un estudio con 47.377 pacientes del Servicio de Cardiología del Área Sanitaria Integrada de Santiago de Compostela, publicado en la Revista Española de Cardiología (REC), reveló que los pacientes tuvieron que esperar de media 33 días para ser atendidos por un cardiólogo en el modelo presencial, mientras que la espera fue de 9 días de media, una vez puesto en marcha el modelo de e-consulta. Además, el modelo de e-consulta también se asocia a menos visitas de urgencias (-51%), ingresos hospitalarios (-25%) y de mortalidad anuales (36%). En el caso de oncología, un estudio aleatorizado de fase III ha demostrado la utilidad del sistema de intervención eRAPID en la gestión remota de los efectos adversos durante la quimioterapia. Se trata de una herramienta online que proporciona a cada paciente cursos de acción en respuesta a sus sín- tomas. En función de su severidad, eRAPID puede aconsejar la autogestión mediante fármacos o la búsqueda de atención médica, quedando todas las incidencias y evolución de las mismas registradas en el historial médico del paciente. En pacientes con cánceres ginecológicos, de mama o colorectales que reportaron mediante eRAPID semanalmente durante 18 semanas desde el inicio de la quimiote- rapia, el control de síntomas mejoró significativamente en las semanas 6 y 12. ¿Hacia dónde ir? El Índice Fenin de Madurez Digital en Salud, pre- sentado en junio de 2020, apuntaba que la trans- formación digital de la Salud en nuestro país era de tan solo el 31,7% antes de la pandemia, con gran diferencia entre las diversas comunidades autónomas. El estudio analiza cuatro áreas: ser- vicios digitales para los pacientes; servicios digi- tales para los profesionales; infraestructura IT de Salud Digital, y sistemas analíticos. Para mejor estas cifras, Fenin y Cotec, los promotores del es- tudio, apuntan cuatro aspectos que se deben abor- dar de cara al futuro: • Desarrollar una Estrategia de Salud Digital a nivel nacional acompañada de mecanismos de financiación. • Nuevos modelos de prestación a través de la digitalización (foco en gestión de la cronicidad, envejecimiento saludable e impulso a la telea- sistencia). • Humanizar la tecnología para acercar más al profesional y al paciente, y proporcionar mayor calidad de vida. • Transformar los datos en conocimiento para lo- grar mejores resultados en salud.