im MÉDICO | 56 69 Violeta Sánchez es cardióloga en laUnidad de Imagen y en laUnidad deValvulopatías del Hospital Universitario 12 deOctubre deMadrid. Además, forma parte como investigadora del CIBER Cardiovascular (Instituto de Salud Carlos III) y es colaboradora como investigadora invitada en el CNIC. Actualmente, también es tesorera de la Sociedad Española de Cardiología. “Mi labor combina laasistenciaal pacienteambulante convalvulopatía compleja con el trabajo en la unidad de imagen donde realizo técnicas de imagen avanzada: ecocardiografía de esfuerzo, ecocardiograma transesofágico, resonancia cardiaca y TAC coronario”. Sus líneas de investigación en el CNIC se centran en la valoración de nuevas técnicas de imagen como el análisis del flujo 4D con resonancia en pacientes con miocardiopatías y en el trasplante cardiaco. “En los pacientes con valvulopatías, la valoración clínica va de la mano de la evaluación con técnicas de imagen. La combinación del conocimiento de la clínica y de la utilidad de las distintas técnicas de imagen -especialmentede sus indicaciones, pero tambiénde sus limitaciones- permite un estudio integral de los pacientes con valvulopatías. El resultado supone una mejor coordinación asistencial tanto en el diagnóstico como en el planteamiento terapéutico”. Esto es especialmente importante si tenemos en cuenta que una de cada ocho personas mayores de 75 años sufre una valvulopatía de moderada a severa en Europa. “En España, las cifras se sitúan en el 3% de los afectados mayores de 65 años y en el 7,4% de los pacientes mayores de 85 años”, aseguraVioleta Sánchez, y añade: “Amedidaque aumente lapoblaciónanciana, estas cifras vana seguir creciendo y la patología cada vez va a ser más compleja”. El intervencionismoestructural ha supuestoungran cambioenelmanejode las vavulopatías en los últimos años. “Los resultados en el tratamiento de la valvulopatía aórtica cambiarán las indicaciones actuales. La sustituciónmitral percutáneavaa experimentar unagranevoluciónen los próximos años, así comoel intervencionismotricúspide”. Lógicamente, el desarrollodeestos procedimientos requiere de expertos en imagen especializados en los diferentes procedimientos. Y es que la cardiología está en pleno crecimiento gracias a las nuevas técnicas diagnósticas, innovadores procedimientos terapéuticos y el desarrollode fármacos de vanguardia. “Lacomplejidadde cada uno de los campos hace necesario potenciar la formación de subespecialistas expertos, adaptar las distintas plantillas y dotar a los hospitales de la tecnología acorde al grado de complejidad de los procedimientos que se realizan”. Esto pasa -como no puede ser de otra manera- por mejorar las condiciones laborales de los jóvenes cardiólogos. “La mayoría de ellos, cuando terminan la residencia, realizan la requerida subespecialidadmediante el acceso a becas o contratos precarios sinperspectivas futuras enmuchas ocasiones de trabajo estable”. El futuro está para Violeta Sánchez en la necesidad de adaptarse al aumento del envejecimiento de la población, a la fragilidad de los futuros pacientes y al tratamiento de pacientes con mayor comorbilidad. “Necesitamos formación de subespecialistas expertos” VIOLETA SÁNCHEZ (TESORERA DE LA SOCIEDAD ESPAÑOLA DE CARDIOLOGÍA) Nº COLEGIADA: 46689
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