im MÉDICO | 57 35 En la actualidad, “somos capaces de diagnosticarla más rápido y existen terapias específicas para su tratamiento temprano y sostenido que permiten frenar su actividad”. Además, “estamos logrando avances en la identificación de los factores de riesgo que aumentan la susceptibilidad de una persona a padecer la enfermedad, lo que ayudaría incluso a prevenirla”. De causa desconocida Esta es una enfermedad autoinmune y crónica, de causa desconocida, que afecta al sistema nervioso central y cursa con brotes. Ataca al cerebro y a la médula espinal y se diagnostica, principalmente enmujeres, entre los 20 y 40 años, apareciendo así en un momento de la vida en el que la persona habitualmente está tomando importantes decisiones, como son, por ejemplo, las relativas a una posible maternidad. Por consiguiente, “uno de los puntos a los que hay que prestar especial atención durante el tratamiento es el embarazo”. En ese sentido, es importante tener en cuenta que las pacientes con EM no tienen embarazos de riesgo por el hecho de padecer la enfermedad, sino por las posibles consecuencias de la retirada de su tratamiento en el momento de quedarse embarazada dada la incompatibilidad de la mayor parte de las terapias con el período de gestación. Tanto es así que hace sólo unos años, las pacientes de EM que querían ser madres se veían obligadas a elegir entre seguir adelante con lamedicación para controlar la enfermedad y no quedarse embarazadas, o dejar el tratamiento de forma temporal para tener un embarazo más seguro, aun contando con el riesgo de que la afección pudiera evolucionar. Moebius remarcaque los últimos avances incorporados al arsenal terapéutico contra esta enfermedad han modificado de forma radical elmanejode estas pacientes,“facilitandounaplanificación de la gestación más sencilla y menos estricta con fármacos cuya pautaposológicapermiteplanificar el embarazoseismesesdespués de la última dosis”. Es decir, no existe la necesidad de interrumpir el tratamiento ni exponerse a una posible recaída. Igualmente, existen terapias que, aunque requieren una administración continuada, han demostrado que pueden administrarse de manera eficaz y segura en el embarazo y la lactancia. Casi 30 años comprometidos Le preguntamos cómo han trabajado desde Merck para lograr terapias que posibilitan mejorar y normalizar la vida de los pacientes. “Llevamos casi 30 años comprometidos con las personas que conviven con la EM, acompañándolas y guiándolas en la enfermedad, y también con los profesionales sanitarios, poniendo a su disposición soluciones que atiendan las necesidades médicas no cubiertas de estos pacientes”, declara. Durante este tiempo, desde Merck han mejorado notablemente en el conocimiento sobre cómo actúa la EM y en el desarrollo de estrategias terapéuticas que ayudan a ralentizar su curso y a tratar cada vez mejor sus implicaciones físicas. Estos avances terapéuticos igualmente han servido para“progresar en la normalización de la enfermedad y en la mejora de la calidad de vida de los pacientes” en dos sentidos principal- “Estamos logrando avances en la identificación de los factores de riesgo que aumentan la susceptibilidad a padecer la enfermedad” mente. Por un lado, “se ha logrado reducir el número de recaídas y, por lo tanto, la discapacidad asociada” y, por otro lado, “se ha simplificado el tratamiento, de modo que algunas opciones terapéuticas ya disponibles apenas interfieren en el día a día de las personas con EM”. Todo esto ha facilitado mejorar otros aspectos fundamentales en la vida del paciente como el laboral (los nuevos tratamientos permiten que no sea necesario desplazarse frecuentemente al hospital para controlar la evolución de la enfermedad, reduciendo el absentismo) y en esferas más personales, como puede ser la ya citada planificación familiar. En definitiva, en Merck han desarrollado, y su intención es seguir haciéndolo, “terapias innovadoras que han permitido dar grandes pasos hacia la normalización de la EM”. Somos un país que atrae proyectos de investigación internacionales de su pipeline en el campo de la EM. Muestra de ello es su alianza con el Centro de Esclerosis Múltiple de Cataluña (CEMCAT), institución puntera en el diagnóstico y el tratamiento de esta enfermedad, para el desarrollo de un estudio que ha profundizado en el mecanismo de acción de una de sus terapias en la regulación de la respuesta inmune y la neurodegeneración/regeneración o neuroprotección. Sólida presencia en ECTRIMS 2022 En ECTRIMS 2022, Merck ha tenido una sólida presencia con 39 comunicaciones. Han presentado los datos de un ensayo de fase IV que confirman un beneficio en la calidad de vida de las personas con Esclerosis Múltiple Recurrente (EMR), la más común, tras dos años de tratamiento con una de sus terapias. “Esto son buenas noticias: los pacientes pueden llevar una vida normalizada, casi como si no conviviesen con la EM, con los beneficios físicos y emocionales que esta situación les reporta”, expresa Alexander Moebius. Además, han dado a conocer los resultados de un ensayo fase II con una de sus terapias en desarrollo, un inhibidor de BTK, que muestran una baja actividad de la enfermedad durante más de tres años y medio, un mejor control de la progresión de la discapacidad entre brotes de los pacientes con EMR. Tienen grandes esperanzas en este inhibidor de BTK, puesto que tiene el potencial de convertirse en “la mejor opción de tratamiento para las personas con EMR”.
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